/ martes 14 de febrero de 2023

Feminicidios: responsabilidad de la esfera pública

Gioconda Belli, en el libro “El País de las mujeres” me recuerda a lo que acabamos de vivir en Poncitlán, que dice lo siguiente: “grave que le disparen a una mujer, es como si nos hubieran disparado a todas.” ¿Qué tiene que pasar en el estado de Jalisco para que las mujeres alcancemos justicia en vida?.

Hace unos días en Poncitlán, Alondra y Liliana fueron víctimas de feminicidio en las circunstancias más inenarrables que podríamos imaginar, dentro del propio ministerio público del municipio, algo que nos viene a confirmar lo que todas y todos ya sabíamos, que las mujeres no estamos seguras en ningún espacio que habitamos.

Tras estos lamentables hechos, el gobernador Enrique Alfaro dio declaraciones preocupantes para la seguridad y la integridad de todas las mujeres en Jalisco. Enlisto, como si se tratase de una lista de pendientes, a las víctimas de feminicidios que van en el año y presumió con bombo y platillo la detención de los feminicidas: Norma Imelda, asesinada en Tototlán; Norma Alicia, asesinada en Tonalá; Ericka Nohemí asesinada en Puerto Vallarta; Liliana y Alondra en Poncitlán; Sandra Paola que se encuentra en coma tras una agresión por su expareja en Zapopan y una niña que un año siete meses asesinada por su padrastro.

Lo que agravó estos feminicidios, es que el titular del ejecutivo, se deslindó de la prevención de la violencia y la protección de las mujeres que perdieron la vida en manos de sus agresores, lo resumió al ámbito privado y responsabilizó a las mujeres y la sociedad de su propia seguridad. Cabe señalar que algunas de ellas ya tenían denuncias previas por estos ataques que, finalmente le pusieron fin a sus vidas, es decir, el Estado y todo su aparato le falló a las mujeres; y las declaraciones, que ojalá el gobernador no hubiera emitido, dejaron algo claro: las mujeres estamos solas, aun cuando a gritos hemos acudido a las instituciones por todos los mecanismos que presumen salvarán nuestras vidas.

Quisiera no tener que escribir de esto, que un día se volvieran solo conmemoraciones de luchas pasadas, de resistencias históricas, una recapitulación de luchas que por fin nos llevó a la libertad de nuestros cuerpos. Sin embargo esto no puede ser así, no cuando todos los días se nos arrebata la vida como si no valiera nada cada denuncia, cada visita al Centro de Justicia para las Mujeres, a los Ministerios Públicos y las fiscalías, cada intento de supervivencia a la violencia machista en este estado.

A las mujeres en el Estado, nos asesinan las instituciones cuando son omisas, nuestros agresores cuando por fin cumplen sus amenazas de poner fin a nuestra vida y de nuevo las instituciones cuando permiten que esto le suceda sistemáticamente a las mujeres Jaliscienses y además nos hacen responsables.

Colectivas, partidos políticos, diputadas, asociaciones civiles, hicimos un llamado colectivo para que la Secretaria de Igualdad Sustantiva y el Fiscal del Estado de Jalisco, comparezcan ante el Congreso del Estado de Jalisco, y rindan cuentas de sus acciones para prevenir, erradicar y sancionar la violencia feminicida; así mismo, exhortamos al Gobernador Enrique Alfaro a reivindicar sus declaraciones y retractarse de las mismas, además de ser capacitado en materia derechos humanos de mujeres y niñas, así como de violencia de género.

Gioconda Belli, en el libro “El País de las mujeres” me recuerda a lo que acabamos de vivir en Poncitlán, que dice lo siguiente: “grave que le disparen a una mujer, es como si nos hubieran disparado a todas.” ¿Qué tiene que pasar en el estado de Jalisco para que las mujeres alcancemos justicia en vida?.

Hace unos días en Poncitlán, Alondra y Liliana fueron víctimas de feminicidio en las circunstancias más inenarrables que podríamos imaginar, dentro del propio ministerio público del municipio, algo que nos viene a confirmar lo que todas y todos ya sabíamos, que las mujeres no estamos seguras en ningún espacio que habitamos.

Tras estos lamentables hechos, el gobernador Enrique Alfaro dio declaraciones preocupantes para la seguridad y la integridad de todas las mujeres en Jalisco. Enlisto, como si se tratase de una lista de pendientes, a las víctimas de feminicidios que van en el año y presumió con bombo y platillo la detención de los feminicidas: Norma Imelda, asesinada en Tototlán; Norma Alicia, asesinada en Tonalá; Ericka Nohemí asesinada en Puerto Vallarta; Liliana y Alondra en Poncitlán; Sandra Paola que se encuentra en coma tras una agresión por su expareja en Zapopan y una niña que un año siete meses asesinada por su padrastro.

Lo que agravó estos feminicidios, es que el titular del ejecutivo, se deslindó de la prevención de la violencia y la protección de las mujeres que perdieron la vida en manos de sus agresores, lo resumió al ámbito privado y responsabilizó a las mujeres y la sociedad de su propia seguridad. Cabe señalar que algunas de ellas ya tenían denuncias previas por estos ataques que, finalmente le pusieron fin a sus vidas, es decir, el Estado y todo su aparato le falló a las mujeres; y las declaraciones, que ojalá el gobernador no hubiera emitido, dejaron algo claro: las mujeres estamos solas, aun cuando a gritos hemos acudido a las instituciones por todos los mecanismos que presumen salvarán nuestras vidas.

Quisiera no tener que escribir de esto, que un día se volvieran solo conmemoraciones de luchas pasadas, de resistencias históricas, una recapitulación de luchas que por fin nos llevó a la libertad de nuestros cuerpos. Sin embargo esto no puede ser así, no cuando todos los días se nos arrebata la vida como si no valiera nada cada denuncia, cada visita al Centro de Justicia para las Mujeres, a los Ministerios Públicos y las fiscalías, cada intento de supervivencia a la violencia machista en este estado.

A las mujeres en el Estado, nos asesinan las instituciones cuando son omisas, nuestros agresores cuando por fin cumplen sus amenazas de poner fin a nuestra vida y de nuevo las instituciones cuando permiten que esto le suceda sistemáticamente a las mujeres Jaliscienses y además nos hacen responsables.

Colectivas, partidos políticos, diputadas, asociaciones civiles, hicimos un llamado colectivo para que la Secretaria de Igualdad Sustantiva y el Fiscal del Estado de Jalisco, comparezcan ante el Congreso del Estado de Jalisco, y rindan cuentas de sus acciones para prevenir, erradicar y sancionar la violencia feminicida; así mismo, exhortamos al Gobernador Enrique Alfaro a reivindicar sus declaraciones y retractarse de las mismas, además de ser capacitado en materia derechos humanos de mujeres y niñas, así como de violencia de género.