/ jueves 16 de junio de 2022

Las prioridades presupuestales que le convienen al Presidente

El pasado 01 de abril el Presidente López Obrador remitió a la Cámara de Diputadas y Diputados un documento que contiene los pre-criterios de política económica para nuestro país y los programas prioritarios del Gobierno Federal para el siguiente año, con lo cual abrió el debate presupuestal en México para el ejercicio 2023.

Conocer aquellos programas que el Presidente López Obrador considera prioritarios para el siguiente año resulta un ejercicio interesante para estimar su postura durante el quinto año de su presidencia y para saber qué vendrá para México en los aspectos sociales, económicos y políticos.

En una primera aproximación de lo que será la postura presupuestal, que desde Palacio Nacional se impulsará para el siguiente año, advertimos que 76 programas resultan una prioridad para el Presidente de México, los cuales abarcaron casi 947 mil millones de pesos, es decir, poco más del 13 por ciento de los 7 billones de gasto neto en el presente año.

Ahora bien, de los 76 programas que resultan prioritarios para el Presidente López Obrador el siguiente año, 7 de ellos concentran poco más de 362 mil millones de pesos. Estos programas corresponden a becas y apoyos monetarios directos, dirigidos a un universo de prácticamente 17 millones de personas en nuestro país, según datos del Padrón Único de Beneficiarios del Gobierno Federal.

Los datos anteriores obligan a la necesaria reflexión para construir, en la discusión del paquete económico del próximo año, una política fiscal con mayor responsabilidad para nuestro país, algo que parece que el Presidente López Obrador está ignorando.

El problema no radica precisamente en que 5 de cada 100 pesos del presupuesto se destinen en 7 programas de becas y pensiones para 17 millones de personas; el problema es la falta de regulación y el empleo de dichos apoyos para la construcción de fuerzas electorales afines al proyecto político del Presidente.

El problema presupuestal en México, no es que se destinen 362 mil millones de pesos en apoyos económicos directos, el problema es que no se prioricen de la misma forma programas que estimulen el crecimiento económico, la innovación, la ciencia y la tecnología, para generar mayor riqueza en el país, para garantizar el desarrollo social de manera sostenible.

Desde el Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputadas y Diputados impulsaremos en la construcción del próximo presupuesto para 2023 una distribución equilibrada, pero sobre todo responsable, del gasto público; dando la batalla para garantizar la asignación a programas que han sido debilitados -y en algunos casos olvidados- en este sexenio como son los apoyos para mexicanas y mexicanos emprendedores, el fortalecimiento de pueblos mágicos, el respaldo para personas que padecen cáncer, comenzando por las niñas y niños mexicanos, y el fortalecimiento de aquellas acciones que permitan a las familias de nuestro país, contar con una economía más sólida.

El pasado 01 de abril el Presidente López Obrador remitió a la Cámara de Diputadas y Diputados un documento que contiene los pre-criterios de política económica para nuestro país y los programas prioritarios del Gobierno Federal para el siguiente año, con lo cual abrió el debate presupuestal en México para el ejercicio 2023.

Conocer aquellos programas que el Presidente López Obrador considera prioritarios para el siguiente año resulta un ejercicio interesante para estimar su postura durante el quinto año de su presidencia y para saber qué vendrá para México en los aspectos sociales, económicos y políticos.

En una primera aproximación de lo que será la postura presupuestal, que desde Palacio Nacional se impulsará para el siguiente año, advertimos que 76 programas resultan una prioridad para el Presidente de México, los cuales abarcaron casi 947 mil millones de pesos, es decir, poco más del 13 por ciento de los 7 billones de gasto neto en el presente año.

Ahora bien, de los 76 programas que resultan prioritarios para el Presidente López Obrador el siguiente año, 7 de ellos concentran poco más de 362 mil millones de pesos. Estos programas corresponden a becas y apoyos monetarios directos, dirigidos a un universo de prácticamente 17 millones de personas en nuestro país, según datos del Padrón Único de Beneficiarios del Gobierno Federal.

Los datos anteriores obligan a la necesaria reflexión para construir, en la discusión del paquete económico del próximo año, una política fiscal con mayor responsabilidad para nuestro país, algo que parece que el Presidente López Obrador está ignorando.

El problema no radica precisamente en que 5 de cada 100 pesos del presupuesto se destinen en 7 programas de becas y pensiones para 17 millones de personas; el problema es la falta de regulación y el empleo de dichos apoyos para la construcción de fuerzas electorales afines al proyecto político del Presidente.

El problema presupuestal en México, no es que se destinen 362 mil millones de pesos en apoyos económicos directos, el problema es que no se prioricen de la misma forma programas que estimulen el crecimiento económico, la innovación, la ciencia y la tecnología, para generar mayor riqueza en el país, para garantizar el desarrollo social de manera sostenible.

Desde el Grupo Parlamentario del PAN en la Cámara de Diputadas y Diputados impulsaremos en la construcción del próximo presupuesto para 2023 una distribución equilibrada, pero sobre todo responsable, del gasto público; dando la batalla para garantizar la asignación a programas que han sido debilitados -y en algunos casos olvidados- en este sexenio como son los apoyos para mexicanas y mexicanos emprendedores, el fortalecimiento de pueblos mágicos, el respaldo para personas que padecen cáncer, comenzando por las niñas y niños mexicanos, y el fortalecimiento de aquellas acciones que permitan a las familias de nuestro país, contar con una economía más sólida.