/ domingo 8 de diciembre de 2019

Un congreso cominero

Mis respetos para las personas preocupadas por la diversidad sexual, por su conducta, por su forma de pensar, de ser, de decir, de exhibir, de ufanar, de promover, siempre y cuando no agredan mi espacio familiar y personal, mediante la exhibición, la promoción, la divulgación, como a cualquier heterosexual, no le va, ni se le debe permitir la exhibición, la discriminación, la ofensa, la degradación, que me parece que resulta ocioso perder el tiempo, unos y otros.

Más aun, el Poder Legislativo, existiendo múltiples prioridades de suma trascendencia para unos y otros, al margen de las preferencias sexuales de cualquier ciudadano, que me parece que con el solo hecho de exigirse e imponerse el mutuo respeto a tales circunstancias y con solo un reglamento de policía y buen gobierno de los municipios, debe ser suficiente para la armonía y convivencia entre las personas que el género debe ser importante pero respetuoso y respetable.

Es por ello que me parece un congreso cominero el que estén pretendiendo legislar para sancionar aquel que promueva u oriente a quien crea o tiene tendencias homosexuales a efecto de mediante terapia ayude a quien tenga interés en superar tal situación, que desde luego, estoy cierto, que no hay medio ni forma de obligar a esos seres a recibir esa terapia, que quien la promueve y la aplica, dice ser efectiva, cuestión que para la generalidad de la sociedad es intrascendente, sobre todo para quien está seguro de sí.

Muy respetable la tendencia de todos y cada uno de los que integran el Congreso del Estado, que por lo que ya he comentado, líneas atrás, me parece que queda evidente lo pobre o pequeño que resulta su alcance en su desempeño como Legisladores, ya que existen tantas y diversas necesidades legislativas para fortalecer el desarrollo de nuestra entidad, como es el de realizar estudios serios, honestos, responsables y trascendentes, para que los jaliscienses podamos desarrollarnos en las urgentes y suficientes circunstancias de seguridad, salud, educación, trabajo, vialidad y de honestidad, eficiencia de los servidores públicos, así como de todos los que formamos esta comunidad tan desordenada, me parece que lamentablemente, muy cobarde por el silencio y la pasividad de la gente, que poco o nada hace y dice para obligar a quien resulta ser el representante popular, a tener un eficaz y productivo desempeño en tan delicada encomienda y muy en particular me quiero referir al gremio de los abogados, es vergonzoso que hay doctores, maestros, licenciados, no sé si hasta con títulos de nobleza, pero me parece que es más la miseria moral y profesional que lo que se presume en los membretes.

* Director del Observatorio Académico de Justicia y Seguridad Publica de la División de Estudios Jurídicos de la UdeG.

locb15@hotmail.com

Mis respetos para las personas preocupadas por la diversidad sexual, por su conducta, por su forma de pensar, de ser, de decir, de exhibir, de ufanar, de promover, siempre y cuando no agredan mi espacio familiar y personal, mediante la exhibición, la promoción, la divulgación, como a cualquier heterosexual, no le va, ni se le debe permitir la exhibición, la discriminación, la ofensa, la degradación, que me parece que resulta ocioso perder el tiempo, unos y otros.

Más aun, el Poder Legislativo, existiendo múltiples prioridades de suma trascendencia para unos y otros, al margen de las preferencias sexuales de cualquier ciudadano, que me parece que con el solo hecho de exigirse e imponerse el mutuo respeto a tales circunstancias y con solo un reglamento de policía y buen gobierno de los municipios, debe ser suficiente para la armonía y convivencia entre las personas que el género debe ser importante pero respetuoso y respetable.

Es por ello que me parece un congreso cominero el que estén pretendiendo legislar para sancionar aquel que promueva u oriente a quien crea o tiene tendencias homosexuales a efecto de mediante terapia ayude a quien tenga interés en superar tal situación, que desde luego, estoy cierto, que no hay medio ni forma de obligar a esos seres a recibir esa terapia, que quien la promueve y la aplica, dice ser efectiva, cuestión que para la generalidad de la sociedad es intrascendente, sobre todo para quien está seguro de sí.

Muy respetable la tendencia de todos y cada uno de los que integran el Congreso del Estado, que por lo que ya he comentado, líneas atrás, me parece que queda evidente lo pobre o pequeño que resulta su alcance en su desempeño como Legisladores, ya que existen tantas y diversas necesidades legislativas para fortalecer el desarrollo de nuestra entidad, como es el de realizar estudios serios, honestos, responsables y trascendentes, para que los jaliscienses podamos desarrollarnos en las urgentes y suficientes circunstancias de seguridad, salud, educación, trabajo, vialidad y de honestidad, eficiencia de los servidores públicos, así como de todos los que formamos esta comunidad tan desordenada, me parece que lamentablemente, muy cobarde por el silencio y la pasividad de la gente, que poco o nada hace y dice para obligar a quien resulta ser el representante popular, a tener un eficaz y productivo desempeño en tan delicada encomienda y muy en particular me quiero referir al gremio de los abogados, es vergonzoso que hay doctores, maestros, licenciados, no sé si hasta con títulos de nobleza, pero me parece que es más la miseria moral y profesional que lo que se presume en los membretes.

* Director del Observatorio Académico de Justicia y Seguridad Publica de la División de Estudios Jurídicos de la UdeG.

locb15@hotmail.com