/ lunes 19 de febrero de 2024

Peor que Huerta


La traición de Victoriano Huerta, no fue cosa menor, que asesinó al presidente Madero y al senador Pino Suarez, para llegar a usurpar la presidencia de la república, asesino a más de trescientos mexicanos, desde luego sin el mas elemental sentido humano, al derramarse la sangre sin misericordia en la capital del país, si bien es cierto, que este despojo de personas accedió a la presidencia de la republica sin derramar sangre, es lamentable darnos cuenta que llego al poder mediante una alianza siniestra, con criminales de alto calado, de una crueldad inusitada, a quienes no obstante de tal perfil y de haber, hasta la fecha, asesinado a mas de ciento setenta mil ciudadanos en esa diversidad de procesos, para asesinar y desaparecer a hombres, mujeres y niños por todos los rincones de la patria, a lo que la corcholata que hoy pretende suceder a tan soberbio criminal que amparado en la estrategia de “abrazos y no balazos” y que la corcholata Sheinbaum, que pretende dar continuidad al desastre que hoy encabeza López Obrador, y que su estrategia obedece a un gran sentido humano supuesto, toda vez de que jamás se ha tomado la estrategia ni lo harán tampoco, de combatir la delincuencia, asesinando a esos que se dice también tienen derechos humanos, sino que esa mágica estrategia implementada para combatir la delincuencia es la manera mas sabia de pacificar el país, pues supuestamente es el único modo de hacerlo, sin medir siquiera la cantidad de homicidios que se han cometido a la fecha y que día con día se comenten y de lo que solamente existen estadísticas y ninguna acción real de parte de las autoridades en funciones y con la inaudita tolerancia y cobardía del congreso de la unión, integrado en su gran mayoría por traidores y cobardes que solo medran con el cargo público que los partidos encumbraron y que desafortunadamente en el actual proceso electoral pretenden -en los mismos o en otros cargos- continuar, con el latrocinio que vive todo el país.

Ante tal escenario, la patria demanda del pueblo sabio y bueno el despertar y actuar en consecuencia, en principio, para fincar responsabilidad de quien se ha convertido en el más soberbio y arrogante traidor a la patria y demás corifeos que le acompañan, encubren y participan en la tragedia por la que transita el país y en especial, porque aquel al que ese pueblo le entrego su confianza y el poder para gobernar ha claudicado de manera pública, reconociendo la organización del crimen y aceptando que los actores religiosos traten de pacificar el país, lo que es verdaderamente intolerable e inusitado, en esta patria que alcanzo su composición republicana a un alto costo de más de un millón de vidas en una revolución que le dio origen al Estado Mexicano, que hoy por hoy, se ve desierto por la traición de la que es victima y que todos los sectores de la población debemos unirnos para enfrentar esta terrible realidad, hasta alcanzar el orden que esta escrito en la carta magna, que este truhan pretende desaparecer y que mas de trescientos traidores, depositarios de la representación popular y de los estados que componen la republica mexicana, así nos cueste la vida, tenemos que enfrentar la desgracia por la que transita la república, ya que la patria lo vale y como lo dijera el siervo de la nación, “todos los mexicanos bien nacidos tenemos que ofrendar hasta la vida si es necesario” pero ya acabar con esta situación tan indigna y dolorosa de este pueblo, que todos los días se desangra y que ha perdido la soberanía que reposa en él y que de él dimana, para acceder al poder.

No podemos cerrar los ojos y la conciencia ante el actual proceso electoral que está en curso y dejar de ver y reconocer que quienes integran la actual administración pública, la han traicionado y que quienes aspiran a acceder a los cargos públicos, para los que se ha convocado, desde la presidencia de la república, senadores y diputados federales y en algunos estados de la república, convocados igualmente para la elección de gobernadores, diputados locales y munícipes, que muchos senadores, diputados de la federación, exgobernadores, diputados en funciones, exdiputados, exmunícipes, que consintieron y contribuyeron a que el país llegara al desastre mas álgido de la historia y que no se les puede permitir que sigan causando semejante perjuicio al sufragar en su favor, cuando deben de ser llamados a cuentas para que respondan de sus actos u omisiones, de los que son responsables y que no pueden quedar impunes como hasta hoy sucede, la patria lo vale y debemos sacar la casta, el honor, la dignidad, el valor civil, para elegir a los mejores hombres y mujeres sin distinción de géneros, que vengan a reestablecer la republica que hoy se encuentra destrozada en todos los sentidos, ya que la vida esta despreciada, la educación, la salud, la seguridad publica y el patrimonio de todos los mexicanos, vamos todos por un mejor México, que nos demanda nuestra actuación.


Director del Observatorio Académico de Justicia y Seguridad Pública de la División de Estudios Jurídicos de la Universidad de Guadalajara*


La traición de Victoriano Huerta, no fue cosa menor, que asesinó al presidente Madero y al senador Pino Suarez, para llegar a usurpar la presidencia de la república, asesino a más de trescientos mexicanos, desde luego sin el mas elemental sentido humano, al derramarse la sangre sin misericordia en la capital del país, si bien es cierto, que este despojo de personas accedió a la presidencia de la republica sin derramar sangre, es lamentable darnos cuenta que llego al poder mediante una alianza siniestra, con criminales de alto calado, de una crueldad inusitada, a quienes no obstante de tal perfil y de haber, hasta la fecha, asesinado a mas de ciento setenta mil ciudadanos en esa diversidad de procesos, para asesinar y desaparecer a hombres, mujeres y niños por todos los rincones de la patria, a lo que la corcholata que hoy pretende suceder a tan soberbio criminal que amparado en la estrategia de “abrazos y no balazos” y que la corcholata Sheinbaum, que pretende dar continuidad al desastre que hoy encabeza López Obrador, y que su estrategia obedece a un gran sentido humano supuesto, toda vez de que jamás se ha tomado la estrategia ni lo harán tampoco, de combatir la delincuencia, asesinando a esos que se dice también tienen derechos humanos, sino que esa mágica estrategia implementada para combatir la delincuencia es la manera mas sabia de pacificar el país, pues supuestamente es el único modo de hacerlo, sin medir siquiera la cantidad de homicidios que se han cometido a la fecha y que día con día se comenten y de lo que solamente existen estadísticas y ninguna acción real de parte de las autoridades en funciones y con la inaudita tolerancia y cobardía del congreso de la unión, integrado en su gran mayoría por traidores y cobardes que solo medran con el cargo público que los partidos encumbraron y que desafortunadamente en el actual proceso electoral pretenden -en los mismos o en otros cargos- continuar, con el latrocinio que vive todo el país.

Ante tal escenario, la patria demanda del pueblo sabio y bueno el despertar y actuar en consecuencia, en principio, para fincar responsabilidad de quien se ha convertido en el más soberbio y arrogante traidor a la patria y demás corifeos que le acompañan, encubren y participan en la tragedia por la que transita el país y en especial, porque aquel al que ese pueblo le entrego su confianza y el poder para gobernar ha claudicado de manera pública, reconociendo la organización del crimen y aceptando que los actores religiosos traten de pacificar el país, lo que es verdaderamente intolerable e inusitado, en esta patria que alcanzo su composición republicana a un alto costo de más de un millón de vidas en una revolución que le dio origen al Estado Mexicano, que hoy por hoy, se ve desierto por la traición de la que es victima y que todos los sectores de la población debemos unirnos para enfrentar esta terrible realidad, hasta alcanzar el orden que esta escrito en la carta magna, que este truhan pretende desaparecer y que mas de trescientos traidores, depositarios de la representación popular y de los estados que componen la republica mexicana, así nos cueste la vida, tenemos que enfrentar la desgracia por la que transita la república, ya que la patria lo vale y como lo dijera el siervo de la nación, “todos los mexicanos bien nacidos tenemos que ofrendar hasta la vida si es necesario” pero ya acabar con esta situación tan indigna y dolorosa de este pueblo, que todos los días se desangra y que ha perdido la soberanía que reposa en él y que de él dimana, para acceder al poder.

No podemos cerrar los ojos y la conciencia ante el actual proceso electoral que está en curso y dejar de ver y reconocer que quienes integran la actual administración pública, la han traicionado y que quienes aspiran a acceder a los cargos públicos, para los que se ha convocado, desde la presidencia de la república, senadores y diputados federales y en algunos estados de la república, convocados igualmente para la elección de gobernadores, diputados locales y munícipes, que muchos senadores, diputados de la federación, exgobernadores, diputados en funciones, exdiputados, exmunícipes, que consintieron y contribuyeron a que el país llegara al desastre mas álgido de la historia y que no se les puede permitir que sigan causando semejante perjuicio al sufragar en su favor, cuando deben de ser llamados a cuentas para que respondan de sus actos u omisiones, de los que son responsables y que no pueden quedar impunes como hasta hoy sucede, la patria lo vale y debemos sacar la casta, el honor, la dignidad, el valor civil, para elegir a los mejores hombres y mujeres sin distinción de géneros, que vengan a reestablecer la republica que hoy se encuentra destrozada en todos los sentidos, ya que la vida esta despreciada, la educación, la salud, la seguridad publica y el patrimonio de todos los mexicanos, vamos todos por un mejor México, que nos demanda nuestra actuación.


Director del Observatorio Académico de Justicia y Seguridad Pública de la División de Estudios Jurídicos de la Universidad de Guadalajara*