/ miércoles 21 de julio de 2021

México: Avante en artes, ciencias y deporte

Ante la amplia serie de graves problemas que enfrentamos desde hace tiempo, señalar los logros que hemos alcanzado en el arte, la ciencia y el deporte, nos podría servir de contrapeso en el propósito de mantener el ánimo siquiera en niveles mínimos.

Andamos mal en economía, porque ya no solamente el aparato productivo nacional anda volando baja y ve crecer envidiablemente al extranjero; en equilibrio social, porque pese al elevado número de millonarios que tenemos, se cuentan por legiones los “nuevos pobres” que cada día surgen en el país; en seguridad pública, por esto tan serio del alza en delitos graves; en servicios, por la evidente negligencia de algunos políticos y constructores y la mala calidad de las obras públicas; justicia por la corrupción que se expande en el medio judicial y el aumento de la impunidad. Y así sucesivamente.

Empero, si no obstante este panorama adverso guardamos el ánimo de echar una ojeada a otras actividades, veremos que no obstante todo lo que tenemos en contra, México sigue avante en campos no tan elementales, pero que sirven como timbre de orgullo a los connacionales que tenemos la fortuna de admirar esos triunfos.

Hacer un recuento de todas las conquistas de mexicanos en los ámbitos que al principio mencionamos, está fuera de nuestro alcance y de nuestro espacio, pero sí podemos hacer algunas menciones de triunfadores que siguen poniendo en alto el nombre de México.

Diego Rivera y Clemente Orozco en la pintura; Isaac Hernández, un verdadero divo del ballet; en la música tenemos a Moncayo, con su inmortal Huapango. ¿Y el Ballet Folclórico de Zamarripa? Una belleza de movimientos que hacen honor al término artístico de concierto.

Todo esto parece un sueño, conocer, saborear, vivir la grandeza de mexicanos creadores de enormes obras de arte, convertidas luego, cada día, en el recreo de privilegiados diletantes.

En las ciencias, un botón como muestra son los repetidos triunfos de estudiantes nacionales en certámenes mundiales de electrónica, de ciencia y de tecnología en general. Sin olvidar -porque esta hazaña es imborrable- el invento de la televisión de color.

En el deporte contamos con la incomparable raquetista Paola Longoria, campeona del mundo; Rafa Márquez, con su brillante carrera en el Barcelona; las camadas de futbolistas mexicanos que son estrellas de Europa, como Raúl Jiménez en Inglaterra; Hirving Lozano en Italia y Chicharito Hernández en Alemania. ¿Y el Penta-Pichichi, Hugo Sánchez, que se ha inmortalizado por su inigualable trayectoria en el Real Madrid?. ¿Y los clavadistas como Joaquín Capilla? ¿Y nadadores como el Tibio Muñoz? ¿Y Raúl González, Daniel Bautista, Soraya Jiménez y Paola Espinosa? ¿Y el legendario Humberto Mariles? Ahhh.. y los infaltables boxeadores, que hoy postulan al Canelo Urbina. ¡Cuánta grandeza de México!

Además de beisbolistas de la talla de Fernando Valenzuela y otros más que se han sumado a esa corriente de peloteros mexicanos que triunfan en el vecinos país del Norte.

Esta es una lista interminable, que no podemos continuar por el temor de ser excluyentes, al no apuntar aquí -sería imposible desde luego- los nombre de muchos que han dado lustre a nuestro país y nos siguen dando grandes satisfacciones y deleites cada día que disfrutamos de su trabajo. No nos alcanza la mente para recordar todo lo bueno que México ha aportado al mundo en el arte, la ciencia y el deporte.

En fin, en estos tiempos en que los mexicanos enfrentamos serios problemas, tenemos un consuelo en admirar todo lo que se ha hecho y se sigue haciendo en los campos en que seguimos mostrando nuestra creatividad.

* Periodista

Ante la amplia serie de graves problemas que enfrentamos desde hace tiempo, señalar los logros que hemos alcanzado en el arte, la ciencia y el deporte, nos podría servir de contrapeso en el propósito de mantener el ánimo siquiera en niveles mínimos.

Andamos mal en economía, porque ya no solamente el aparato productivo nacional anda volando baja y ve crecer envidiablemente al extranjero; en equilibrio social, porque pese al elevado número de millonarios que tenemos, se cuentan por legiones los “nuevos pobres” que cada día surgen en el país; en seguridad pública, por esto tan serio del alza en delitos graves; en servicios, por la evidente negligencia de algunos políticos y constructores y la mala calidad de las obras públicas; justicia por la corrupción que se expande en el medio judicial y el aumento de la impunidad. Y así sucesivamente.

Empero, si no obstante este panorama adverso guardamos el ánimo de echar una ojeada a otras actividades, veremos que no obstante todo lo que tenemos en contra, México sigue avante en campos no tan elementales, pero que sirven como timbre de orgullo a los connacionales que tenemos la fortuna de admirar esos triunfos.

Hacer un recuento de todas las conquistas de mexicanos en los ámbitos que al principio mencionamos, está fuera de nuestro alcance y de nuestro espacio, pero sí podemos hacer algunas menciones de triunfadores que siguen poniendo en alto el nombre de México.

Diego Rivera y Clemente Orozco en la pintura; Isaac Hernández, un verdadero divo del ballet; en la música tenemos a Moncayo, con su inmortal Huapango. ¿Y el Ballet Folclórico de Zamarripa? Una belleza de movimientos que hacen honor al término artístico de concierto.

Todo esto parece un sueño, conocer, saborear, vivir la grandeza de mexicanos creadores de enormes obras de arte, convertidas luego, cada día, en el recreo de privilegiados diletantes.

En las ciencias, un botón como muestra son los repetidos triunfos de estudiantes nacionales en certámenes mundiales de electrónica, de ciencia y de tecnología en general. Sin olvidar -porque esta hazaña es imborrable- el invento de la televisión de color.

En el deporte contamos con la incomparable raquetista Paola Longoria, campeona del mundo; Rafa Márquez, con su brillante carrera en el Barcelona; las camadas de futbolistas mexicanos que son estrellas de Europa, como Raúl Jiménez en Inglaterra; Hirving Lozano en Italia y Chicharito Hernández en Alemania. ¿Y el Penta-Pichichi, Hugo Sánchez, que se ha inmortalizado por su inigualable trayectoria en el Real Madrid?. ¿Y los clavadistas como Joaquín Capilla? ¿Y nadadores como el Tibio Muñoz? ¿Y Raúl González, Daniel Bautista, Soraya Jiménez y Paola Espinosa? ¿Y el legendario Humberto Mariles? Ahhh.. y los infaltables boxeadores, que hoy postulan al Canelo Urbina. ¡Cuánta grandeza de México!

Además de beisbolistas de la talla de Fernando Valenzuela y otros más que se han sumado a esa corriente de peloteros mexicanos que triunfan en el vecinos país del Norte.

Esta es una lista interminable, que no podemos continuar por el temor de ser excluyentes, al no apuntar aquí -sería imposible desde luego- los nombre de muchos que han dado lustre a nuestro país y nos siguen dando grandes satisfacciones y deleites cada día que disfrutamos de su trabajo. No nos alcanza la mente para recordar todo lo bueno que México ha aportado al mundo en el arte, la ciencia y el deporte.

En fin, en estos tiempos en que los mexicanos enfrentamos serios problemas, tenemos un consuelo en admirar todo lo que se ha hecho y se sigue haciendo en los campos en que seguimos mostrando nuestra creatividad.

* Periodista