Don taquero, don tortero, doña lonchería y muchas de los puestos de fritangas, así como la cebolla, jitomate y carne, son algunas de las causas por las que la inflación en México ha subido de manera importante, llegando a su punto máximo de 8.7%.
Con incrementos que van desde un peso hasta 2 pesos con 50 centavos por taco según sea la zona es como el incremento de precios comienza a afectar a los comensales y los dueños de esos puestos ya no soportaron las alzas en los costos de sus insumos. Los precios de los tacos pueden ir desde los 11 pesos hasta más de 50, según el establecimiento. Las tortas desde los 25 pesos hasta los 100 también dependiendo el lugar y los ingredientes.
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En el caso de Antonio, taquero de tradición de la zona de El Álamo Industrial, dijo que “ya no podía aguantar más los precios, todo está subiendo; la cebolla la compro a 36 pesos, el aguacate también muy caro y la carne, por eso decidí subirlo un peso, no más, porque la gente también lo siente y bajan los clientes”.
Con más de 20 años de tradición -desde su papá- está consciente de que no podía tener un mayor incremento ya que tampoco busca perjudicar a sus clientes para sacar unos pesos extras, sino que sólo lo justo. Mencionó que espera no suban más los precios de los productos que utiliza.
Mientras que Carolina, quien vive en la zona de Real del Valle, en el municipio de Tlajomulco, mencionó que al puesto al que va le subieron hasta dos pesos con 50 centavos y el pretexto fue el incremento de los insumos. Pero el alza de precios no se queda ahí, también las hamburguesas sencillas pasaron de 50 a 65 pesos, por los mismos argumentos.
Aurora quien en su fraccionamiento vende tortas cubanas en lo que va del año ya le subió 10 pesos al pasar de 50 a 60 pesos cada una, lo mismo con las burritas de pierna subieron 10 pesos la orden de cuatro; el agua antes la vendía medios litros y ahora sólo litros completos.
Alfredo mencionó que a la lonchería que va algunos productos ya subieron de precio debido a que la pieza de bolillo se encuentra ya hasta en 12 a 15 pesos, cuando hace un año no pasaba de los 10 pesos y eso también impacta los precios y si se le suma el costo del gas, cebolla, jitomate, lechuga, jamón, el precio es mayor.
Mientras que los datos que muestra el Inegi a septiembre pasado la pieza de bolillo más cara estaba en nueve pesos; el kilo de tortilla de maíz en 24 pesos; el kilo de chuleta en 130; lomo de cerdo en 138 el kilo; la pierna de cerdo sin hueso en 119 pesos; el bistec de res en 224 pesos el kilo; la carne molida hasta en 192 pesos; el kilo de jamón más caro en 306 pesos, por ser de pechuga de pavo.
En el caso del chorizo el costo llegó a estar hasta en 161 pesos; la salchicha hasta en 119 pesos; queso amarillo en rebanadas la marca más cara está hasta septiembre pasado en 248 pesos el kilo; mientras que el kilo de aguacate se ubicó en 80 pesos; el limón hasta en 42 pesos; la cebolla hasta en 55 pesos y en el caso del jitomate en 32 pesos; la lechuga hasta en 27 pesos por pieza; el tomate que se usa para las salsas verdes hasta en 39 pesos.
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Así, los precios de horror de algunos insumos que se utilizan en los puestos de tacos, loncherías y establecimientos que venden estos productos que tanto gustan al paladar de los mexicanos.
