Más por disciplina profesional periodística, y hasta por el morbo, este reportero tuvo que ver el presunto debate de aspirantes al gobierno de Jalisco.
Igual que el dedicado a los aspirantes a inquilinos de Los Pinos, grupos políticos y económicos interesados poseedores de medios informativos, negocios y demás, pusieron la carpa para que los vividores de la política y de nuestros impuestos nuevamente se salpicaran de lixiviados.
Por algo “o por mucho” y a pesar de todo, los políticos y los marionetistas buscan el voto. Tener el poder y el mando es necesario para sobrevivir y como muchos de esos aspirantes, su familia y sus cuateroles, no saben más que vivir del presupuesto a través de la nómina o de los negocios, pululan buscando al cliente que les siga pagando.
Todos los candidatos prometen a pesar que los presupuestos y los problemas no se solucionan solamente con finanzas jaliscienses. Hay necesidades que no tienen arreglo. Preguntan y ven a la gente con sus necesidades y tratan de cooptar el voto con despensas, menaje de casa, materiales para construcción y hasta calentadores solares para el agua. Y la gente acepta porque “lo caído..caído”, ¡qué caray!! La ciudadanía, luego decidirá su asistencia a las urnas y por quién votará. La necesidad y el hambre es caramba y si alguien, aporta pues bienvenido. En estricto dar y recibir en estos casos podría ser deshonesto pero las dos partes buscan lo suyo. El político que lo siga manteniendo la ciudadanía. Esta, la moneda por acudir a la urna, el obsequio, etc.
Las fotografías de los recorridos que por las calles hacen los candidatos muestran las constantes mentiras que repiten los actuales burócratas metidos al servicio público. Dicen que están acabando con el hambre, que los servicios públicos están bien, etc. Las campañas político electorales demuestran que no hay obras y servicios públicos eficientes; que el desarrollo social no es como lo pintan; que el rezago educativo en todos los aspectos es incompleto, etc. Ah!, pero las nóminas no fallan para los salarios burocráticos.
Los candidatos al gobierno de Jalisco no dijeron ni se acusaron de nada nuevo. Andan en lo suyo: ofreciendo todo, sin contar más que con los recursos sociales y con ello la posibilidad del saqueo. Bien dice el refrán: con estos …toros viejos, hay que arar”. Y…qué pasa?
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