/ lunes 15 de julio de 2019

Pasado, presente y futuro

La definición de pasado, ofrece varias acepciones, según el punto tratado, se sitúa en que el pasado es el tiempo que ya sucedió y que, en una línea cronológica, ha quedado atrás. Se conoce como pasado tanto a dicho tiempo como a aquello que aconteció en el periodo en cuestión.

En el trayecto de nuestra vida recordamos el pasado ya sea al escuchar algún tipo de música, personas que conocimos, cosas que aprendimos de ellas, pero, en ocasiones, encontramos personas que realmente están ancladas en el pasado y que no pueden avanzar en sus proyectos de vida.

Psicológicamente es dañino vivir del pasado y más aún, vivir con rencores o resabio en contra de los demás porque, de este modo, se están perdiendo de muchas cosas dando como resultado a tener un comportamiento nada recomendable para sí mismo. El problema central no es tanto mirar hacia el pasado y recordar, lo malo se agrava cuando se vive en forma continua del pasado porque esto puede causar un temor vivir en el presente y no saber qué hacer cuando se presentan obstáculos o desafíos en la vida, si continuamos viviendo en el pasado. Aunque existe un añejo dicho; recordar el pasado es vivir.

El vocablo presente, es de origen latino “praesens”, es un concepto con múltiples usos y acepciones, se trata de un adjetivo que permite hacer referencia al tiempo que transcurre en el momento actual o a aquel en el que se halla una persona cuando cuenta algo.

De tal manera queda determinado que para cada evento cerebral hay un presente correspondiente, el humano no necesita conocer todos los eventos que forman el presente ya que, siendo una clase de eventos contenidos abstractamente, carecen de poder causal, psicológicamente se concluye que el presente casualmente está conectado con un dado evento cerebral, ya que es una construcción conceptual del cerebro basada en la abstracción de eventos que pertenecen a una clase de equivalencia, de lo cual se desprende que no es una cosa o un cambio en una cosa.

La palabra futuro es el término que en nuestro idioma empleamos con recurrencia cuando queremos expresar el tiempo que está por venir o aquello que está por llegar. La psicología del tiempo es una rama de la ciencia que estudia los procesos mentales, es el campo donde se profundiza el análisis de la influencia que tiene el tiempo en el comportamiento humano. Vivir solo pensando en el futuro, bloquea nuestra mente y no se podrán realizar proyectos actuales con la misma eficiencia y eficacia por desviar nuestros pensamientos del aquí y ahora.

Ahora bien, existen antítesis sosteniendo que, las personas sin una claridad de lo que desean en el futuro, llegarán más rápido al fracaso.

En el libro “La paradoja del tiempo”, los psicólogos Philip Zimbardo y John Boyd, realizan una exhaustiva descripción del comportamiento que tienen quienes se orientan al pasado, al presente y al futuro respectivamente. Otro teórico de la psicología, Antonini, sostiene que las personas más orientadas hacia el futuro son reflexivas y pueden postergar los deseos que tienen en el momento en pos de sus responsabilidades y metas.

En síntesis, recordemos que nuestra vida se integra por experiencias, vivencias que pueden formar parte de un pasado doloroso donde nos hicieron daño o un error que cometimos y que no somos capaces de perdonarnos, pero, no es recomendable quedarse estancado en ellos y así seguir la ruta de nuestra vida, ser felices dejando atrás los malos recuerdos y para lograrlo son necesarios tres ingredientes; olvidar el pasado, vivir el presente y dejar que llegue el futuro sin temor a enfrentarlo.

Respetable lector, en esta breve redacción abordo los principales conceptos y acepciones, usted tendrá la mejor opinión al respecto para hacer un análisis, seguro estoy que sabemos distinguir aquellas personas que solo viven criticando a los demás por lo que hicieron o dejaron de hacer en el pasado, perdiéndose en el presente y, más aún, no tener con claridad que buscan en el futuro, gracias por sus comentarios acertados recibidos.


* Rector General del Centro Universitario UTEG

E. mail: joseroque@uteg.edu.mx


La definición de pasado, ofrece varias acepciones, según el punto tratado, se sitúa en que el pasado es el tiempo que ya sucedió y que, en una línea cronológica, ha quedado atrás. Se conoce como pasado tanto a dicho tiempo como a aquello que aconteció en el periodo en cuestión.

En el trayecto de nuestra vida recordamos el pasado ya sea al escuchar algún tipo de música, personas que conocimos, cosas que aprendimos de ellas, pero, en ocasiones, encontramos personas que realmente están ancladas en el pasado y que no pueden avanzar en sus proyectos de vida.

Psicológicamente es dañino vivir del pasado y más aún, vivir con rencores o resabio en contra de los demás porque, de este modo, se están perdiendo de muchas cosas dando como resultado a tener un comportamiento nada recomendable para sí mismo. El problema central no es tanto mirar hacia el pasado y recordar, lo malo se agrava cuando se vive en forma continua del pasado porque esto puede causar un temor vivir en el presente y no saber qué hacer cuando se presentan obstáculos o desafíos en la vida, si continuamos viviendo en el pasado. Aunque existe un añejo dicho; recordar el pasado es vivir.

El vocablo presente, es de origen latino “praesens”, es un concepto con múltiples usos y acepciones, se trata de un adjetivo que permite hacer referencia al tiempo que transcurre en el momento actual o a aquel en el que se halla una persona cuando cuenta algo.

De tal manera queda determinado que para cada evento cerebral hay un presente correspondiente, el humano no necesita conocer todos los eventos que forman el presente ya que, siendo una clase de eventos contenidos abstractamente, carecen de poder causal, psicológicamente se concluye que el presente casualmente está conectado con un dado evento cerebral, ya que es una construcción conceptual del cerebro basada en la abstracción de eventos que pertenecen a una clase de equivalencia, de lo cual se desprende que no es una cosa o un cambio en una cosa.

La palabra futuro es el término que en nuestro idioma empleamos con recurrencia cuando queremos expresar el tiempo que está por venir o aquello que está por llegar. La psicología del tiempo es una rama de la ciencia que estudia los procesos mentales, es el campo donde se profundiza el análisis de la influencia que tiene el tiempo en el comportamiento humano. Vivir solo pensando en el futuro, bloquea nuestra mente y no se podrán realizar proyectos actuales con la misma eficiencia y eficacia por desviar nuestros pensamientos del aquí y ahora.

Ahora bien, existen antítesis sosteniendo que, las personas sin una claridad de lo que desean en el futuro, llegarán más rápido al fracaso.

En el libro “La paradoja del tiempo”, los psicólogos Philip Zimbardo y John Boyd, realizan una exhaustiva descripción del comportamiento que tienen quienes se orientan al pasado, al presente y al futuro respectivamente. Otro teórico de la psicología, Antonini, sostiene que las personas más orientadas hacia el futuro son reflexivas y pueden postergar los deseos que tienen en el momento en pos de sus responsabilidades y metas.

En síntesis, recordemos que nuestra vida se integra por experiencias, vivencias que pueden formar parte de un pasado doloroso donde nos hicieron daño o un error que cometimos y que no somos capaces de perdonarnos, pero, no es recomendable quedarse estancado en ellos y así seguir la ruta de nuestra vida, ser felices dejando atrás los malos recuerdos y para lograrlo son necesarios tres ingredientes; olvidar el pasado, vivir el presente y dejar que llegue el futuro sin temor a enfrentarlo.

Respetable lector, en esta breve redacción abordo los principales conceptos y acepciones, usted tendrá la mejor opinión al respecto para hacer un análisis, seguro estoy que sabemos distinguir aquellas personas que solo viven criticando a los demás por lo que hicieron o dejaron de hacer en el pasado, perdiéndose en el presente y, más aún, no tener con claridad que buscan en el futuro, gracias por sus comentarios acertados recibidos.


* Rector General del Centro Universitario UTEG

E. mail: joseroque@uteg.edu.mx