Pocos eventos en el mundo tienen el reconocimiento y prestigio de la Feria Internacional del Libro en Guadalajara, la misma Feria del Libro de la UNAM en la ciudad de México, que antes de la FIL gozaba de amplio prestigio y reconocimiento internacional, se ha visto disminuida ante el crecimiento y prestigio de la FIL de Jalisco, digo de Jalisco y debo decir de México como país, porque eventos y muestras como está, no solo nos llenan de orgullo como jaliscienses, sino además como mexicanos. Gracias al loable labor del Rector Padilla y su equipo.
A consecuencia del COVID muchas de los eventos mundiales se han tenido que cancelar, posponer o limitar, sin embargo, como todas las buenas obras sobrevive a los embates de la ignorancia.
Fue curioso la referencia a la FIL pretendiendo minimizarla, desde el centro del país, específicamente de Palacio Nacional, calificándola de conservadora, calificar a un evento cultural internacional de libros con el odio del resentimiento, como en otros casos, solo por el hecho de no haber sido producto de su iniciativa, evidencia odio a los libros, a la inteligencia y a la tolerancia que debe fincarse en el respeto a las ideas con sentido común, que se manifiesta en indicadores tan significativos, como el uso de cubre bocas, como lo usan los médicos, por higiene y atención para con sus semejantes.
La crítica, ha hecho evidente el egocentrismo de los criticados que no pueden asimilar que en el mundo haya personajes que puedan tener mejores ideas que ellos y que logren más y mejores obras, sin su participación, así sucedió en la cancelación del proyecto del aeropuerto internacional, pero como dice el adagio popular, no hay mal que dure cien años, ni enfermo que lo resista, también Abraham Lincoln, dijo que “se puede engañar a muchos mucho tiempo, se puede engañar a algunos algún tiempo, pero no se puede engañar a todos todo el tiempo”
Esta semana, como se ha vuelto costumbre, las noticias surgidas de Palacio Nacional, oscilan entre evasivas, cortinas de humo, justificaciones de necedades y evidencias de intolerancia.
La renuncia de Alfonso Romo de la oficina de la presidencia, que evidencia nuevamente cerrazón del presidente a escuchar lo que no le gusta, aunque sea la realidad, que le hace perder un importante interlocutor con el sector empresarial, el anuncio de la firma del convenio con los laboratorios Pfizer para contar con doscientas cincuenta mil vacunas en el mes de diciembre, que no serían para la totalidad de la población, apenas para los funcionarios de MORENA y sus familias, frente a la cantidad de muertos por COVID resulta una cortina de humo.
México ha sobrevivido a pesar de sus gobernantes y de la clase política tan heterogénea, pareciera que hay quienes se empeñan en destruir a México, dilapidar su riqueza desperdiciarla, despilfarrarla y sin embargo a pesar de los males México sigue en pie y seguirá en pie, porque los mexicanos somos fuertes y sabemos reponernos a pesar de los desastres naturales, biológicos y políticos,
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