/ miércoles 25 de noviembre de 2020

El G20 y los pobres primero

Óscar Ramírez Castellanos

La retórica del presidente de México estuvo presente el fin de semana pasado en la cumbre mundial de los países más industrializados así cómo de los países con las economías emergentes más importantes del planeta que en su conjunto representan aproximadamente el 85% del producto interno bruto mundial. Por obvias razones este año el G20 se llevo acabo de manera virtual, siendo el tema central la recuperación económica tras la pandemia por el Covid19 y en el que los mandatarios intervinieron para exponer sus estrategias políticas y económicas.

En el caso de México, la intervención de AMLO se centró en la línea discursiva que históricamente ha manejado de “Primero los pobres” lo cual se escucha muy bonito y cautiva a cualquiera esta frase, sin embargo, llevarla a la práctica con acciones contundentes en la realidad no ha sucedido en nuestro país en lo que va de este sexenio por lo menos en beneficio de los más desfavorecidos, ya que con la desaparición del seguro popular y la reciente creación del INSABI, que por cierto no cuenta aún con la infraestructura necesaria.

En efecto, los primeros en quedarse sin atención médica han sido los pobres, así mismo al desaparecer las estancias infantiles y guarderías los primeros en resultar afectados son la clase obrera y trabajadora que tienen la necesidad de dejar a sus hijos mientras trabajan, también con el desabasto de medicinas los pobres de nuevo son los afectados ya que ellos no tienen recursos para comprarlas y lamentablemente también quienes primero están quedando desempleados por la pandemia son los pobres, por la falta de inyección de recursos a las micro y pequeñas empresas para sostener los empleos, como lo han hecho diversos países verbigracia Canadá e incluso como lo ha hecho el propio estado de Jalisco con los múltiples programas de reactivación económica.

La pobreza es una pandemia milenaria que todos debemos combatir, sin embargo, debe ser con rumbo y como lo señalan los expertos de las Naciones Unidas, del fondo monetario internacional, del banco mundial o el propio G20, garantizando el acceso universal a la educación, a los servicios de salud y a la generación de empleos, estos son los pilares para combatir la desigualdad y la pobreza de fondo. Si bien es cierto que debemos enfocarnos en la base de la pirámide, que mejor incentivando al sector productivo micro y pequeño para que se generen más empleos y garantizar empleos dignos en vez de estar a la expectativa de una despensa o de dinero regalado que al final del camino será un barril sin fondo y no resuelve el problema de raíz.

Que será mejor en la estrategia de poner de verdad primero a los pobres ¿regalarles el pescado por un sexenio o enseñarnos todos a pescar?

Concluyó con el pensamiento de Nelson Mandela, “Erradicar la pobreza no es un acto de caridad, es un acto de justicia” y agregaría que tampoco es de un discurso.

Twitter. @ORmzCastellanos

Facebook. @ramirezcastellanos.oscar


Óscar Ramírez Castellanos

La retórica del presidente de México estuvo presente el fin de semana pasado en la cumbre mundial de los países más industrializados así cómo de los países con las economías emergentes más importantes del planeta que en su conjunto representan aproximadamente el 85% del producto interno bruto mundial. Por obvias razones este año el G20 se llevo acabo de manera virtual, siendo el tema central la recuperación económica tras la pandemia por el Covid19 y en el que los mandatarios intervinieron para exponer sus estrategias políticas y económicas.

En el caso de México, la intervención de AMLO se centró en la línea discursiva que históricamente ha manejado de “Primero los pobres” lo cual se escucha muy bonito y cautiva a cualquiera esta frase, sin embargo, llevarla a la práctica con acciones contundentes en la realidad no ha sucedido en nuestro país en lo que va de este sexenio por lo menos en beneficio de los más desfavorecidos, ya que con la desaparición del seguro popular y la reciente creación del INSABI, que por cierto no cuenta aún con la infraestructura necesaria.

En efecto, los primeros en quedarse sin atención médica han sido los pobres, así mismo al desaparecer las estancias infantiles y guarderías los primeros en resultar afectados son la clase obrera y trabajadora que tienen la necesidad de dejar a sus hijos mientras trabajan, también con el desabasto de medicinas los pobres de nuevo son los afectados ya que ellos no tienen recursos para comprarlas y lamentablemente también quienes primero están quedando desempleados por la pandemia son los pobres, por la falta de inyección de recursos a las micro y pequeñas empresas para sostener los empleos, como lo han hecho diversos países verbigracia Canadá e incluso como lo ha hecho el propio estado de Jalisco con los múltiples programas de reactivación económica.

La pobreza es una pandemia milenaria que todos debemos combatir, sin embargo, debe ser con rumbo y como lo señalan los expertos de las Naciones Unidas, del fondo monetario internacional, del banco mundial o el propio G20, garantizando el acceso universal a la educación, a los servicios de salud y a la generación de empleos, estos son los pilares para combatir la desigualdad y la pobreza de fondo. Si bien es cierto que debemos enfocarnos en la base de la pirámide, que mejor incentivando al sector productivo micro y pequeño para que se generen más empleos y garantizar empleos dignos en vez de estar a la expectativa de una despensa o de dinero regalado que al final del camino será un barril sin fondo y no resuelve el problema de raíz.

Que será mejor en la estrategia de poner de verdad primero a los pobres ¿regalarles el pescado por un sexenio o enseñarnos todos a pescar?

Concluyó con el pensamiento de Nelson Mandela, “Erradicar la pobreza no es un acto de caridad, es un acto de justicia” y agregaría que tampoco es de un discurso.

Twitter. @ORmzCastellanos

Facebook. @ramirezcastellanos.oscar