Con la exigencia de justicia y reconociendo la solidaridad de toda la comunidad, dentro y fuera de la Universidad de Guadalajara (UdeG), el Consejo General Universitario reanudó sesión este martes a las afueras de Casa Jalisco.
Organizaciones estudiantiles de otros estados se sumaron al llamado por la liberación de Javier Armenta, Iván Ilich Cisneros y José Rojas y se reconoció el apoyo del Gobierno Federal en el caso.
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Por primera vez en 230 años de historia de la UdeG, el consejo sesionó en la calle, y esto lo hizo en las inmediaciones del campamento que la comunidad universitaria mantiene desde hace cinco noches -afuera de Casa Jalisco- en protesta por la detención de los tres estudiantes, quienes enfrentan acusaciones por la defensa que han realizado del Parque Resistencia Huentitán.
Aunque se volvió a decretar un receso de la sesión, a la espera de los resultados de la audiencia que este martes también se retomó con los tres estudiantes en Puente Grande, durante la misma el rector general de la UdeG, Ricardo Villanueva Lomelí, dio un breve panorama de la situación actual y recordó que el tema como tal tiene más carga política que jurídica.
"Me parece que sin duda la liberación de nuestros estudiantes dependía más de la presión política que pudiéramos hacer, que de la estrategia jurídica que se lleve, porque es evidente que este juicio se ha llevado totalmente fuera de la ley. Tiene muchísimas inconsistencias y por eso no podíamos confiar en la opinión de un juez que le declara prisión preventiva oficiosa a tres estudiantes, cuando la prisión preventiva acaba de desaparecer de nuestro país", expresó, al referir que la decisión de la comunidad de tomar la calle ha sido clave para poner los reflectores en una injusticia.
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Reconoció a todos los que se han sumado al llamado de justicia, entre sociedad y voces políticas de partidos como Hagamos, PRI, PRD, Futuro, PT, Verde y de Morena, así como al presidente Andrés Manuel López Obrador.
"Yo sí quiero desde esta tribuna agradecer al presidente Andrés Manuel López Obrador, la congruencia que demuestra de que él sí sabe el valor de la calle, él sí sabe distinguir entre un luchador social y un delincuente. Y la diferencia entre un luchador social y un delincuente es que el luchador social a veces violenta la norma o leyes, pero lo hace por el bien público, el delincuente transgrede la ley por un beneficio personal (...). El apoyo que hemos recibido de parte del Gobierno Federal es invaluable, y así como hemos criticado, yo pediría que el consejo le dé un aplauso al presidente y Gobierno Federal por la sensibilidad que han mostrado".
Durante la sesión se dio voz a integrantes de la Confederación Nacional de Estudiantes Mexicanos (CONEM), quienes llegaron en apoyo al campamento, así como a la presidenta de la FEU, Zoé García. En conjunto condenaron las acciones en contra de los tres estudiantes y exigieron su liberación.
En sesión se decretó un receso y Villanueva Lomelí anunció que él, y una comisión de la universidad, se irían a Puente Grande para seguir de cerca la audiencia de los estudiantes.
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