En mi columna pasada introduje el complejo tema de las Islas de Calor Urbanas, y hoy, abordando el mismo tema, te invito a leer la continuación de este fenómeno de importancia primaria dentro las zonas urbanas.
Para los ciudadanos, las Isla de Calor Urbano (ICU) provocan afectaciones en la salud, en la economía y en el desarrollo urbano, ya que aumenta en la incidencia de enfermedades respiratorias y gastrointestinales. Además, genera un incremento en la emisión de contaminantes atmosféricos. Podemos identificar las ICU en la zona central de la ciudad, en Huentitán y Guadalajara, en la región conocida como base aérea y Tesistán en Zapopan, así como en Centro Sur y Santa Cruz del Valle en Tlaquepaque.
Las ICU y su estacionalidad son muy variadas, manifestándose con mayor intensidad en primavera/verano, mientras que en otros casos se observan en otoño/invierno. En Guadalajara, en primavera es cuando este fenómeno se intensifica, con una diferencia de 12°C más que en las de otoño. Este fenómeno ocurre por el aumento en la densidad de construcción, particularmente en áreas donde se ha observado un incremento de zonas pavimentadas y el crecimiento de la infraestructura vertical.
Es importante hacer acciones que tengan impacto positivo para contrarrestar los efectos de las Islas de Calor en la salud de las personas y en nuestro entorno. Desde Guadalajara, nos comprometemos con el medio ambiente con campañas anuales de reforestación, en la cual, se han plantado un total de 28 mil 617 nuevos árboles en distintos puntos de la ciudad en lo que va de la administración. Además, se ha impulsado la creación de 70 corredores urbanos, que son pasillos de vegetación que forman una red continua de Bosques Urbanos, parques y áreas verdes municipales
Incentivamos a las nuevas construcciones privadas a adoptar prácticas sustentables y comprometidas con el medio ambiente. Ofrecemos incentivos fiscales y otros beneficios para aquellos que elijan construir de manera sostenible. También estamos trabajando en proyectos de movilidad urbana sostenible, como ciclovías, y promovemos la educación vial para reducir el uso del automóvil, entre otras iniciativas.
Los ciudadanos también podemos ayudar a que las islas de calor disminuyan, cuidando el árbol de mi banqueta, incrementando los espacios verdes en casa, cuidando parques y jardines en mi localidad, impermeabilizando de blanco mi azotea para tener una sensación de confort y la temperatura sea la adecuada para así evitar el uso de aires acondicionados u otros aparatos para enfriar los espacios, tener aparatos y equipos eficiente en el hogar disminuyendo la carga en la red eléctrica. Dejar de utilizar el automóvil, optimizando las personas por viaje también ayuda.
Seamos empáticos, toda acción que de forma individual realicemos impactara para que nuestro hijos y siguientes generaciones disfruten de una ciudad llena de confort, calidad y sustentable.
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