En el 2024, México tendrá su primera mujer Presidenta, después de 69 años donde las mujeres votamos por primera vez en elecciones federales, seremos parte de la historia de nuestro país, tendremos una mujer Presidenta. Sí Presidenta.
El proceso electoral ya inició, más de 10 mil mujeres competirán por cargos públicos, esta es la gran oportunidad para cambiar la historia, para construir el México que soñamos y anhelamos las mujeres, para hacer posible, un país para todas y todos.
Las mujeres somos parte fundamental en las transformaciones sociales, somos protagonistas en la construcción del estado de derecho y en el fortalecimiento de nuestro país.
Ha sido precisamente nuestra participación en los asuntos públicos, lo que ha transformado el rol de la mujer en la política, abonando en la construcción de una democracia incluyente y más equitativa.
La crítica y el cuestionamiento constante del sistema en el que vivimos, nos permite revisar y trascender de lo aprendido, las mujeres somos agentes de cambio, somos artífices de la historia y la lucha por participar en una sociedad más justa, y para este proceso electoral no será la excepción, estamos en pie de lucha para lograr un México más humano y libre, ya no estamos dispuestas a “aguantar vara”, y haremos valer nuestros derechos con la fuerza de todas, con todas y por todas.
El México que todas queremos, exige una democracia participativa que incluya todas nuestras voces y todas nuestras demandas, una democracia con igualdad de trato y oportunidades para todas y todos, libre de pobreza y desigualdad, pero sobre todo, libre de violencia. Una democracia plural, incluyente y paritaria, en donde el bien común sea el objetivo, esa es la democracia que anhelamos.
Con prudencia y esperanza, debemos reconocer que, a pesar de haber avanzado, como sociedad no tenemos lo que queremos y por eso debemos hacer lo que sea necesario para alcanzar lo que anhelamos.
El compromiso de la próxima Presidenta es hacer la diferencia, hacer de México un mejor lugar del que encontramos y del que tenemos hoy; seguir luchando por las causas aún pendientes y llevar el legado de quienes estuvieron detrás, y soñaran con la brecha que se abre para quienes vienen más adelante.
Como refiere nuestra querida Xóchitl Gálvez, la esperanza ha cambiado de manos y ahora nos pertenece.
*Diputada Local, Partido Acción Nacional.
Twitter: @mirellemontes
