La ciudad forma parte de la vida de muchos habitantes del mundo; construirlas de manera resiliente y sustentables es esencial para el óptimo desarrollo, la cero contaminación y la reducción de desigualdades. El día de hoy, te hablo sobre el objetivo de desarrollo sostenible número 11 “ciudades y comunidades sostenibles” para visibilizar los problemas y áreas de oportunidad que la engloban.
La ciudad, en las últimas décadas, se ha convertido en un estilo de vida global, según datos de la ONU, la población mundial alcanzó los 8000 millones de personas en 2022, de las cuales más de la mitad vivían en zonas urbanas. Se prevé que esta cifra aumente y que para 2050 el 70% de la población vivirá en ciudades. A pesar de ello, mucha de esa población vive en situación de marginación, aproximadamente 1100 millones de personas y se espera que en los próximos 30 años haya 2000 millones más.
La urbanización ha alcanzado a muchos sectores de las ciudades de manera rápida y poco planeada; el desarrollo de la vivienda, la infraestructura y los servicios se pueden visualizar como superados, generando condiciones de marginación en sus poblaciones. Además, el crecimiento descontrolado y la poca planeación en temas medio ambientales, provocan más emisiones de carbono, causando contaminación y mala calidad del aire.
La desigualdad y los niveles de consumo urbano de energía y de contaminación son algunos de los principales retos. Según datos de la ONU, las ciudades apenas ocupan el 3% de la superficie terrestre, pero suponen entre el 60 % y el 80 % del consumo energético y el 75% de las emisiones de carbono, muchas ciudades son más vulnerables a los efectos del cambio climático y a los desastres naturales debido a su elevada concentración de población y a su ubicación, por lo que mejorar la resiliencia urbana es crucial para evitar pérdidas humanas, sociales y económicas.
Recientemente, el gobierno de Guadalajara, presento un proyecto que promueve viviendas accesibles y asequibles entre la población más vulnerable, que busca garantizar el derecho a la vivienda adecuada, así como transformar el paisaje urbano mediante la colaboración entre el gobierno local y la iniciativa privada.
Además, como ya lo he hablado en columnas pasadas, Guadalajara cuenta con un plan de movilidad integral, que procura los medios limpios o con cero emisiones, para que las y los ciudadanos puedan moverse.
Implementar políticas y planes para promover el uso eficiente de recursos, mitigar el cambio climático y reducir las desigualdades es necesario para el cumplimiento de las metas de este objetivo, en las cuales, Guadalajara se encuentra en desarrollo, para garantizar una vida plena de sus habitantes.
Miguel.zarateh@hotmail.com
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