Una de las historias que estremeció a México fue la muerte de la pequeña Guadalupe de tan solo cuatro años de edad.
Todo ocurrió en marzo del 2017, cuando se encontró el cadáver de la menor tirado en el Bordo de Xochiaca, Estado de México. Su pequeño cuerpo estaba envuelto en una cobija y usaba solo una camiseta color verde y unas calcetitas rojas, estas últimas fueron las le dieron el nombre al caso.
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El asesinato se hizo famoso porque la activista Frida Guerrera, nombre con el que se hace llamar, se encargó de difundir el caso y ayudar a que se esclareciera lo que había pasado con la menor de edad.
Al no tener una identidad definida, se hizo un retrato de cómo habrá sido la niña cuando estaba con vida. Fueron nueve meses en los que la identidad de la menor era desconocida hasta que descubrieron que jamás había sido registrada. Un hombre habló con las autoridades y señaló que la madre era una adicta y que en una ocasión le había dejado a Lupita durante algunas semanas, hasta que volvió por ella. Las tías de la menor la identificaron tras su difusión, así como la mamá del padrastro, quien declaró en contra de su hijo.
La Fiscalía General de Justicia del Estado de México detuvo a la madre y al padrastro, quienes tras una larga investigación fueron encontrados culpables del infanticidio de Lupita. Los hechos ocurrieron durante la mañana del 18 de marzo.
El padrastro de 29 años y su madre la golpearon, pero fue él quien le dio un golpe en la cabeza causándole la muerte, todo porque la niña se hizo del baño y no les avisó. Además, el cuerpo estuvo un día dentro de la casa, hasta que decidieron tirarlo en un terreno baldío.
El juez que llevó el caso dictaminó la sentencia, dándoles 88 años de prisión a Pablo N y Yadira N. Además, agregó multas por 449 mil 115 pesos y de 165 mil 323 pesos por reparación del daño.
Finalmente, la menor fue registrada como Guadalupe Medina Pichardo.
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