La velocidad que la tecnología le impone a la difusión del conocimiento es uno de los grandes retos a enfrentar por las universidades si es que no desean quedarse rezagadas ante el auge de la Inteligencia Artificial y el Chat GPT, pero sobre todo revalorar la figura del docente como fuente de información confiable, señalaron rectores de la UNAM, UdeG, Querétaro y de las universidades de España.
En el foro denominado Las universidades en la sociedad del conocimiento que se realizó dentro de la Feria Internacional del Libro Leonardo Lomelí Vanegas, rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) mencionó que el avance del conocimiento a través de las tecnologías que es un tema “apasionante y nos debe de preocupar a todas las instituciones de educación superior” ya que “el conocimiento es el factor más importante para impulsar el crecimiento económico en este siglo”.
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Como ejemplo de la alta velocidad en la que el conocimiento se transfiere fue el desarrollo de la vacuna contra Covid-19 la cual en otras condiciones habría llevado hasta años y en esta ocasión sólo llevó algunos meses y fue importante para superar rápidamente la emergencia sanitaria.
Todo eso plantea a las universidades un gran reto en donde se tiene la necesidad de adecuarse a la evolución tan acelerada del conocimiento y eso se traduce en un reto en la docencia y por supuesto en revisar la pertinencia de las carreras que imparten.
“La posibilidad de avanzar hacia modelos multimodales enseñanza a híbridos mixtos, pero que al final de cuentas implica combinar lo mejor de la enseñanza presencial, con las posibilidades que nos ofrecen las plataformas de enseñanza a distancia también la necesidad de reconocer que hoy más que nunca la evolución. El conocimiento puede hacer obsoleto en muy poco tiempo los conocimientos adquiridos en el aula y eso nos plantea la necesidad en insistir en una formación que capacite a los estudiantes para seguir aprendiendo a lo largo de su vida”, dijo.
Además se tiene la necesidad de que las universidades “hoy más que nunca, desarrollamos una oferta robusta de educación a distancia, una oferta que además sea flexible y que combine distintas modalidades nuevamente en particular por la naturaleza misma del público que requiere este tipo de educación en los cursos a distancia o tiempo nos plantea la necesidad de cuestionarnos que tanto debemos de insistir en centrar la formación profesional en lo básico, dejando la posibilidad de seguir aprendiendo o que tanto debemos seguir hacia una hiper especialización”.
Mientras que el rector de la Universidad de Guadalajara (UdeG), Ricardo Villanueva Lomelí, señalo que el reto que se tiene es plantearse es “qué debe enseñar una universidad que no sabe a qué van a dedicar sus estudiantes, es decir, los datos indican que el 65% de las niñas y los niños que hoy estudian en la primaria no existe el trabajo al que se van a dedicar, es verdaderamente difícil preguntarnos”.
Indico que hace tiempo se planteó la duda de cuál es el valor que las nuevas generaciones tienen en los títulos profesionales que expiden “porque la velocidad a la que se mueve el mundo, no es la velocidad en la que nos formamos nosotros y me parece verdaderamente abrumador señalar que en 1945, la humanidad duplicaba su conocimiento cada veinticinco años a partir de 1975 cada doce años en 2023, con los avances de la inteligencia artificial podría duplicarse el conocimiento en menos de 24 horas”.
Como muestra de ese avance vertiginoso de las sociedades de conocimiento, detalló que del 12 de octubre de 1925 que se reabrió la UdeG, en esa época la humanidad duplicabas su conocimiento cada 25 años, pero al día de hoy “que pasamos del 25% al 50 %duplicamos al 75% duplicamos al 87%, y en el 99 duplicamos, en el 2011 duplicamos y el 2023 duplicamos eso nos lleva a un 3,200% en cómo exponencialmente creció la información y el conocimiento. Bueno a la velocidad del Chat GPT y la inteligencia artificial, pues esto que tardó 98 años que es la historia reciente de la universidad en llegar al 3,200%, pues eso sucederá a partir de hoy y hasta el próximo jueves 30 de noviembre, antes de que se acabe la FIL”
Es decir en cinco días sucederá lo que sucedió en 98 años de historia universitaria y si eso no habla de un cambio en la velocidad del mundo, “si eso no nos preocupa a una universidad de 320 mil estudiantes, si no nos preocupa la velocidad con la que se está moviendo el mundo y nuestros planes de estudio nos tardamos siete años a 10 años en cambiarlos, perdón es que las universidades estamos en peligro” y también la humanidad está en peligro.
Es por eso que el reto que enfrentan las universidades es subirse a esa velocidad de la generación de conocimiento si es que “queremos salvar al mundo, porque el mundo se mueve en un lenguaje económico y eso también es peligrosísimo, el mundo sólo habla del lenguaje económico”.
Otra muestra de la velocidad en la que se mueve el conocimiento es lo que generan las plataformas de comunicación y entretenimiento ya que “Netflix tardó en llegar a un millón de usuarios tres años y medio, Twitter tardo dos años, Facebook en 10 meses llegó un millón de usuarios, Spotify en cinco meses, Instagram en 2.5 meses, el Chat GPT en cinco días llegó al millón de usuarios y hoy tiene 100 millones de sobrescritos y mil millones de usuarios mensuales acceden al Chat GPT”.
