En el Centro Comunitario de Salud Mental (CCSM) del Instituto Mexicano Seguro Social (IMSS) Jalisco, es la principal causa de atención.
Esta psicopatología puede manifestarse a cualquier edad, siendo más comúnmente detectado entre los 15 y 25 años debido a la presencia de ciertos síntomas.
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Especialistas señalan la importancia de realizar un diagnóstico temprano; adolescentes y adultos suelen tener síntomas similares, la diferencia es la fase de la enfermedad en qué están cursando.
Entre las características o manifestaciones del trastorno se incluyen la disminución de la necesidad de dormir, distracción con mucha facilidad, el pensamiento acelerado, la agresividad o irritabilidad excesiva, el aumento de la energía, hablar mucho o en exceso, hacer cosas arriesgadas o imprudentes, tener una percepción exagerada de sus habilidades y mostrar una felicidad intensa; síntomas característicos de la fase de manía.
Por otra parte, explican especialistas en salud mental del IMSS que durante la fase de depresión pueden experimentar síntomas como tristeza, sentirse solo o aislarse de los demás, dormir demasiado, ideas suicidas, y pérdida de interés en actividades previamente disfrutadas.
“También pueden llegar a presentar alucinaciones e ideas delirantes, realizar muchos gastos comprando cosas que no son necesarias y quedar endeudados con las tarjetas de crédito o con algún préstamo, por este tipo de gastos, sin llegar a medir las consecuencias de ello”, ejemplifican.
El trastorno bipolar es un problema de salud mental clasificado como un trastorno afectivo o del estado de ánimo, tiene un origen multifactorial, incluyendo componentes genéticos, biológicos, ambientales o psicosociales.
Se caracteriza por cambios extremos en el estado de ánimo y existen distintos tipos, como el trastorno bipolar tipo I, caracterizado por episodios de manía con una duración mínima de una semana; mientras que los episodios de depresión suelen durar al menos dos semanas.
Por otro lado, el trastorno bipolar tipo II se caracteriza por episodios de hipomanía y episodios de depresión. Además, está el trastorno ciclotímico, identificado por síntomas de hipomanía y de depresión persistente, aunque no son tan intensos o duraderos como los episodios de manía o de depresión.
El IMSS Jalisco realiza diagnósticos detallados mediante la historia clínica, evaluando los antecedentes familiares y la temporalidad de los síntomas.
En cuanto al tratamiento, este varía según la fase y el tipo del trastorno, siendo necesario el tratamiento farmacológico y, en algunos casos, hospitalizaciones para estabilizar a pacientes con trastorno bipolar tipo I, mientras que el tipo II se trata generalmente de forma ambulatoria con medicamentos y psicoterapia.
Los especialistas enfatizaron en la necesidad de un tratamiento farmacológico continuo para estabilizar al paciente y permitir su funcionamiento diario, de lo contrario, advierten el riesgo de desencadenar trastorno de personalidad, ansiedad y consumo de sustancias.
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