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Para evitar que cada año las autoridades de la Universidad de Guadalajara (UdeG) no estén sometidas a los vaivenes de la política y presionadas para conseguir un presupuesto decoroso para la institución, el gobernador Enrique Alfaro Ramírez anunció que enviará al Congreso una iniciativa a través de la cual analice la posibilidad de establecer un presupuesto constitucional de al menos el 5% de presupuesto total del estado.
La intención de esta propuesta es que la UdeG cuente con los recursos necesarios para sus actividades y desarrollo pero no estaría sujeto a las presiones políticas y con esta acción también se garantizaría el respeto a su autonomía, además de que Jalisco sería el segundo estado en establecerlo.
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A través de un video publicado en sus redes sociales el mandatario indicó que “después de un largo proceso tenemos condiciones para lograrlo mediante un gran acuerdo que trascienda nuestro gobierno y siente la bases para construir la universidad a la que aspiramos, por eso he decido presentar una iniciativa de reforma a la Constitución de Jalisco para garantizar un presupuesto constitucional para la Universidad de Guadalajara”.
Agrega que de lograr esta reforma le permitiría a las autoridades universitarias tener definida una base presupuestal “que no estaría sujeta a ningún tipo de interferencia política, fortaleciendo así el principio de la autonomía universitaria, esto nos convertiría junto con Veracruz en los únicos dos estados con una disposición constitucional de esta naturaleza”.
La propuesta será entregada este viernes y establece que el presupuesto de la Universidad de Guadalajara deberá representar cuando menos el 5% del presupuesto total de Jalisco y adicionalmente se contará con una bolsa equivalente al 0.3% del presupuesto estatal para infraestructura universitaria.
También se establece que estos recursos para presupuestarlos, ejercicio y comprobación deberán estar sujetas a todas las normas aplicables a los entes públicos, ser ejercidos con una clara rendición de cuentas y estrictamente fiscalizados a través de las instancias dedicadas a esta función.
Agradeció la voluntad del rector Ricardo Villanueva Lomelí para establecer la mesa de diálogo entre ambos para atender las necesidades más apremiantes de la institución y atenderlas en el corto plazo dentro de las posibilidades que dé el escenario de restricción financiera, como se prevé para el 2024, desde la federación.
Alfaro Ramírez indicó que se hizo modificaciones al presupuesto del 2024para establecer u na bolsa de transición y permita acercarse a los parámetros que se establecerían en el presupuestos constitucional en el 2024 y este viernes se hará la propuesta de ajuste para el 2024 para que el presupuesto de la UdeG del próximo año aumento 10% lo que implican 370 millones de pesos adicionales y representarían el 4.6% del presupuesto total estatal.
Además se establece una bolsa de 229 millones de pesos para infraestructura y que sumados a los 272 incluidos en la propuesta original permitirían alcanzar el 0.3% del presupuestos estatal para este concepto y se llegan a 501 millones de pesos con lo que se terminarían las obras ya en proceso.
En ese sentido mencionó y reiteró que se siente orgulloso de mantenerse firme en lo que calificó como los momentos más duros de la relación entre universitarios y su administración, sobre todo del finado presidente de la Feria Internacional del Libro y ex rector, Raúl Padilla López, a quien calificó en más de una ocasión de ser un cacique y adueñarse de la institución, relación que se deterioró con la reasignación de 140 millones de pesos del Museo de Ciencias al Hospital Civil de Oriente.
“Defendiendo mis convicciones y de haber demostrado con la ley en la mano que nunca lastimamos a nuestra universidad y por supuesto de haber generado las condiciones para retomar el diálogo con las autoridades universitarias con respeto y voluntad para construir juntos un nuevo camino”.
Aseguró que cada decisión tomada fue pensado en dejarle un legado a Jalisco y una universidad, desde su punto de vista, libre, concentrada en sus funciones básicas y que disponga de los recursos necesarios para formar a las nuevas generaciones de jaliscienses, es decir una universidad que tenga una relación institucional con los poderes públicos sustentada en el respeto y la cooperación, lo cual considera lo mejor para la universidad y para Jalisco.
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En ese video, Alfaro Ramírez reiteró que su “cariño por la Universidad de Guadalajara es profundo y es de convicción, desde niño mis padres me enseñaron a respetarla y quererla. Mi padre fue rector y madre maestra universitaria, soy miembro de esta comunidad como egresado de la preparatoria número cinco”.
Aseguró que es por esos motivos que ha luchado en todo momento porque la universidad de todos los jaliscienses “recupere su esencia como una institución educativa de excelencia y deje de ser un espacio utilizado para cuidar intereses políticos”.
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