Doha.- Fuera de la cancha el triunfo es claramente iraní, tanto en los alrededores del Estadio Internacional Khalifa como en la tribuna. Los cánticos, las banderas y los colores de Irán dominaron sobre los ingleses.
Los tambores y las cornetas advierten que el mundo árabe está aquí con todo el entusiasmo para vivir su primera copa del mundo.
El público local solidariza también principalmente con el equipo iraní, aunque aficionados de todo el mundo convergen en este inmueble para asistir al debut del Equipo de la Rosa, amplio favorito para llevarse el partido.
¡Irán! ¡Irán! es el cántico que repiten una y otra vez, junto con otros en árabe. De la estación del Metro Sport City al Estadio hay que caminar 15 minutos hasta el acceso, que fue mucho más dinámico que para el partido inaugural en Al Bayt, lo que ayuda a que fuera del estadio se viva la fiesta en completa calma.
Por supuesto, hay mexicanos en el Khalifa Stadium, con sus máscaras de luchadores y sus sombreros. Se detienen cada tantos metros para regalar foto a los aficionados, lo mismo iraníes que ingleses.
El verde, claro atrae más a los iraníes que agradecen en árabe y luego gritan ¡go Mexico! Con marcado acento sobre la i.
Apenas asomar la cabeza a la tribuna se advierte el dominio iraní. Aunque el blanco es el color de ambos equipos, los cánticos, las trompetas, los tambores y los gritos no dejan lugar a dudas: es una contundente victoria iraní fuera de la cancha.
Ensordecedor el cántico unido a sus seleccionados nacionales cuando éstos entonan el himno. El apoyo iraní estalla cuando, encabezados por su capitán, Ehsan Hajsafi, forman un círculo a las orillas de la cancha y se hincan para rezar. Se rompe el círculo y viene un alarido más.
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La afición iraní hizo su parte. Venció a los ingleses, que tímidamente entonan sus cantos y rápidamente son silenciados por la abrumadora mayoría árabe. El delantero toca el balón y entonces es turno del equipo del técnico portugués Carlos Queiroz. Arranca el juego y siguen los gritos. En la tribuna, al menos, no van a rendirse.
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