Debido al confinamiento aumentó entre un 30 y 70 por ciento el cine documental con temas de crímenes, destacó Estrella Araiza, directora del Festival Internacional de Cine (FICG36).
Indicó que aún no se tiene un diagnóstico real de la afectación de la pandemia en la industria fílmica, sin embargo, se mostró segura que en el futuro se verán muchos documentales por efecto de la pandemia.
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Seguido de los documentales de crímenes/violencia, están los musicales, apuntó Araiza, en rueda de prensa que dio con Uri Altell, fundador y Director del Festival In-Edit, con quien se reafirmó los lazos con In-Edit.
Altell, adelantó que en 15 días están por inaugurar el Festival de Barcelona, es el más importante, ya que “son 20 años produciendo un festival puramente documental musical, de todo tipo de géneros y han ido creciendo a nivel internacional y con la alianza con el FICG intentan hacerla más amplia para que se consolide y rinda frutos”.
Señaló que en este festival no habrá música mexicana.
“Lo hacemos en 26 ciudades en el mundo y recibimos entre 800 y un millón de personas por año. En tres semanas arrancamos la edición de Barcelona, uno de los más grandes en términos de público”, agregó.
Dijo que está dándose un cambio de paradigma en el documental musical, “cuando hablamos de músicos jóvenes, ya que las nuevas generaciones tienen otra manera de ver lo audiovisual, mucho más rápida”.
Araiza por su parte, recordó que el FICG cuenta con la sección Son de cine, la cual inició hace 10 años, con muchos colaboradores y ha sido un espacio para poder desarrollar películas documentales que tocan o trastocan la música.
“A partir de que nosotros estamos haciendo esta colaboración con In-Edit, ahora tenemos un espacio más formal y una sociedad más en forma para realizar más cosas, no solamente durante el festival, sino todo el año, esa es la idea y queremos que podamos replicar esta colaboración y ayudar a más personas. Los documentales musicales son una excelente manera de acercarnos a nuevos artistas, nuevos públicos, mercado y no hay mejor socio que In-Edit para hacer que esto también explote en estos lares”, señaló.
“Por ejemplo, en la selección del año pasado pusimos documentales, algunos propuestos por In-Edit, que tenían que ver con cine y mujeres, este tipo de colaboraciones nos permiten descubrir cosas y en el descubrimiento es donde nos conocemos. Yo creo que uno de los beneficios es entender lo que ellos han hecho a lo largo de 20 años y cómo han manejado esta relación con la música porque es complejo”, refirió la directora del FICG36.
