En menos de tres décadas Guanajuato ha logrado consolidar un nuevo destino turístico, ahora es uno de los preferidos y ha llegado para detonar el desarrollo en los municipios y comunidades del suroeste del estado: la Ruta del Tequila.
Esta ruta recorre los municipios de Cuerámaro, Pénjamo, Abasolo y Huanímaro, zona considerada la más fértil para la producción del Agave Tequilana, el propio para la fabricación de esta bebida considerada por excelencia mexicana.
Pero, ¿cómo surge el boom tequilero, que ahora se convirtió en otro punto turístico de Guanajuato? Todo comenzó con el nacimiento del Tequila Corralejo, que en 1996 comenzó a gestarse en el municipio de Pénjamo, particularmente en la comunidad de Estación Corralejo, lugar que es el epicentro de esta bebida en el estado.
Leonardo Rodríguez Moreno, CEO y propietario de Tequila Corralejo y pionero de la fabricación del tequila a gran escala en Guanajuato, relató que todo surgió cuando vivió cinco años en España, en donde producía licor de bellota en la región de Extremadura. Ahí, sus clientes le dijeron: “como buen mexicano, sabrás hacer tequila, ¿no? ¿Qué haces fabricando licores?”.
La idea le revoloteó en la cabeza durante varios años, hasta que un día, en una comida con unos amigos, uno de ellos le dijo que se podía fabricar tequila fuera de Jalisco. Le mostraron el Diario Oficial de la Federación y ahí encontró que había otros lugares en donde podía darse la plantación de agave para fabricar tequila.
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“Pénjamo. Ahí lo vi y dije ‘ese es mi pueblo’”, relató, por lo que sin conocerlo viajó hasta ese municipio desde la Ciudad de México y decidió comenzar a plasmar, sin pensarlo tal vez en ese momento, lo que sería toda una industria tequilera en Guanajuato y aparte un destino turístico más del estado.
Es así que llegó a Pénjamo, le contó a alguien que estaba buscando una casa vieja, lo llevaron a una hacienda abandonada y desde que la vio, a pesar de que estaba en ruinas, él se la imaginó como actualmente está en pie, por lo que no dudó en adquirirla y adecuarla a lo que hoy es la Casa Corralejo.
La Casa Corralejo es uno de los ocho puntos que incluye la Ruta del Tequila de Guanajuato, que inicia desde Irapuato, con un breve recorrido por los campos de fresa, para posteriormente seguir hacia Corralejo, visitar la tequilera, probar no sólo el tequila, sino ron, whisky, brandy y vodka hasta sus exquisitos chocolates y hasta cerveza, nichos a los que se ha extendido ahora la oferta.
El recorrido sigue hacia los campos de agave que están en los límites de Pénjamo y Cuerámaro, que de fondo tienen al Cerro del Fuerte, el punto más alto de la región suroeste de Guanajuato y en donde se encuentra el Área Natural Protegida de la Sierra de Pénjamo.
El recorrido continúa hacia Cuerámaro, municipio con apenas 31 mil habitantes, pero que se caracteriza por ser uno de los que mayor riqueza gastronómica tiene, desde las famosas polveadas, un pan de trigo espolvoreado con azúcar y que se acompaña con atole blanco, hasta el chorizo, que nada le pide a las variedades que se venden en Toluca, pues éste es hecho con condimentos especiales, al grado de que es exportado a Estados Unidos, para que sea consumido por los mexicanos que allá viven.
El recorrido de la Ruta del Tequila culmina con el retorno a Irapuato, para disfrutar de un paseo por el Centro Histórico y admirar los murales de Salvador Almaraz, tanto el que está en la Presidencia Municipal como el que está a un costado del Templo del Hospitalito.
Este recorrido fue incluso nominado como uno de los tres mejores del país en el rubro de gastronomía por la revista Travel + Leisure, junto con la ruta tequilera de Jalisco y la ruta gastronómica y del mezcal oaxaqueño en 2022.
El costo por persona para la Ruta del Tequila es de 250 pesos e incluye un brunch; para adquirirlo es necesario comunicarse a la Dirección de Turismo de Irapuato, para llevarlo a cabo en la próxima visita que se tenga por el estado.
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