La Procuraduría General de la República podría atraer lasinvestigaciones en torno a la desaparición de tres hombres deorigen italiano, ocurrida el pasado mes de enero, en el municipiode Tecalitlán.
El Secretario General del Gobierno, Roberto López Lara,informó que entraron en contacto con la Procuraduría General dela República, por lo que la Subprocuraduría Especializada enInvestigación de Delincuencia Organizada (SEIDO) podría hacersecargo de las investigaciones:
“Porque posiblemente esteasunto ya lo atraiga la SEIDO y bueno, estamos trabajandofuertemente para localizar a estas trespersonas”.
Roberto López agregó que también contactaron a la embajadaitaliana en la Ciudad de México y con la Secretaría de RelacionesExteriores para establecer las actividades que realizaban los tresdesaparecidos en el país.
“Hemos estado en comunicacióncon ellos (Embajada italiana) intercambiando información sobretodo, qué tipo de visas tenían en México, con RelacionesExteriores y demás”, detalló.
El Secretario General de Gobierno no quiso dar detalles sobre lainvestigación para no afectar el proceso de la misma. Agregó quehasta el momento no se tiene contemplada una intervenció en lapolicía municipal de Tecalitlán, pero reconoció que se estáevaluando la posibilidad, esto luego de que los familiaresseñalaran que la última vez que tuvieron contacto con losdesaparecidos, fue cuando les informaron por un mensaje de voz, quehabían sido detenido por policías en una gasolinera.
“En estos momentos todavíano. En estos momentos estamos evaluando de acuerdo a lainformación que se está teniendo y que está fluyendo a travésde las áreas de inteligencia de la Fiscalía del Estado”,expresó.
López Lara informó que, según las primeras investigacioneslas personas desaparecidas se encontraban en Jalisco por cuestionesde negocios y no por cuestiones turísticas.
En la edición impresa del domingo, ELOCCIDENTAL informó que Raffaele Russo, de 60 años,y primos Antonio Russo y Vincenzo Cimmino, de 25 y 29 años,desaparecieron la tarde del 31 de enero pasado en el municipio deTecalitlán. Los últimos dos, en una gasolinera. Ahí fueroninterceptados por policías municipales de Tecalitlán.
“Tuvieron tiempo de mandar unmensaje de voz para decir a otro hermano, que no fue con ellos, quese quedó en el hotel: `nos paró la policía, tenemos una motoadelante y tenemos un carro atrás’. Yo llamé una vez más aVincenzo, como que me contestó, pero no hablaba, sólo quería queescuchara lo que estaban diciendo”, dijo Mario de Vita, primo deambos jóvenes.
Al día siguiente (1 de febrero) Franccesco, hermano de Antonio,presentó la denuncia ante la Fiscalía General del Estado.Posteriormente se regresó a Italia.
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