Una explosión despertó a los habitantes de la zona centro de Tlajomulco de Zúñiga, a escasos metros donde hace 20 días emboscaron a elementos de la Fiscalía de Jalisco dedicados a la búsqueda de personas junto con policías del municipio y donde murieron seis personas y resultaron lesionadas otras 15, incluyendo a civiles. Hoy parece que un explosivo desconocido se detonó, las autoridades dieron con el cráter e investigan.
Los vecinos de las calles Flaviano Ramos y Abasolo, en la colonia Larios, revivieron los hechos ocurridos el 11 de julio del año en curso, cuando atacaron con explosivos sepultados en una brecha, a elementos de la Fiscalía Estatal y de la Policía de Tlajomulco que dejó cuatro oficiales y dos civiles muertos.
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Esta vez el reporte llegó al 911 a las 05:50 de la mañana. El estruendo se escuchó a varios kilómetros a la redonda.
Personal de la Secretaría de Seguridad del Estado envió a su personal del grupo TEDAX especializados en explosivos, quienes se trasladaron a ese sitio y apoyados por binomios caninos revisaron minuciosamente la zona.
Acompañados de personal militar, acordonaron la zona a varios kilómetros a la redonda. Es por seguridad, dicen.
Mientras tanto, los habitantes de la zona se mantenían resguardados en sus casas y era por redes sociales que expresaban que en la madrugada se escuchó el estruendo con menor intensidad que la vez anterior.
Indicaron que el sonido alcanzó a escucharse en la colonia La Noria, El Zapote, Eucaliptos, Vista Sur y la cabecera municipal.
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La evidencia
Ya cerca del mediodía se reforzó la zona, arribó más personal con equipo especial, habían encontrado ya evidencia física como algunos trozos de metal.
Más tarde, cerca de las 14:00 horas se confirmó de la existencia en ese perímetro, de un cráter resultado de una nueva explosión y donde se advierte que un artefacto fue detonado recientemente.
Las autoridades no dieron más detalles, solo se concretaron a informar que “no se reportan personas lesionadas ni afectaciones colaterales”.
Juana N., vecina de la zona, dijo que escucharon el estruendo y se despertaron, “fue similar al de la otra vez, la pesadilla nos volvió, pero esta vez de noche”.
Un noveno explosivo
Y es que apenas el 11 de julio pasado y después de insistentes llamadas telefónicas durante tres días para que acudieran a la supuesta presencia de restos humanos, sin embargo al llegar se activaron a distancia siete de ocho minas antipersonales. Además de los seis muertos, también hubo 15 personas heridas. Solo se recuperó una de las minas.
Por esos hechos hay tres personas detenidas: dos ya fueron vinculadas a proceso, mientras que otra está en espera de que se resuelva su situación legal, lo cual está previsto que sea el próximo 2 de agosto.
Esta vez se cree que este noveno explosivo no fue detectado entonces durante el “barrido” que hizo personal especializado tanto de la Secretaría de Seguridad como del Ejército Mexiocano. Presumen que alguien la operó a distancia o simplemente se activó, con la explosión que estremeció a todos, pero no generó daños o víctimas.
*Con información de Román Ortega y Víctor Chávez