Jalisco prepara la implementación de un impuesto verde para toda aquella industria contaminante y con ello poder cumplir con los compromisos ambientales contraídos por el estado de tener el menor número de emisiones a la atmósfera, aunque no se tiene fecha precisa de para cuando se aplicaría señaló el Gobernador Enrique Alfaro Ramírez, quien pidió a los diputados retomar esta discusión frenada por la pandemia de Covid-19.
Al participar en la inauguración del México Carbon Forum, en donde hizo una presentación de los programas y acciones impulsado en su administración para combatir el cambio climático y el calentamiento global, el mandatario detalló la necesidad de impulsar este impuesto, del que la iniciativa tiene dos años ya en el Congreso local.
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“El tema de los impuestos a las emisiones a las empresas es un asunto que está planteado desde hace dos años, cuando se vino la pandemia se suspendió este debate, lo he platicado con los dirigentes de los organismos empresariales, es un asunto que hay que manejar con cuidado, no es un tema que esté preparándose para la ley de ingresos del próximo año, sino más bien para iniciar un debate, que al final tiene que llevarnos a que paguen un impuesto quienes están contaminando la atmósfera con sus actividades productivas”, indicó.
Pero antes de impulsar este diálogo para saber de cuánto sería el impuesto, primero es necesario que en la entidad se cuente con un “inventario puntual de las emisiones de cada industria, vamos a trabajar en ello y Congreso tendrá que ir poco a poco generando el espacio de diálogo para que este asunto pueda caminar”.
En este sentido se ha platicado con los industriales y saben que es un tema necesario pero que en este momento en el que se tiene la reactivación económica hace difícil poder impulsar un impuesto de esta naturaleza en los próximos, por eso le apuesta para que se haga una planeación y no se tiene un plazo determinando para hacerlo oficial, mientras tanto el compromiso es dialogarlo de forma abierta y franca entre los involucrados, para que no sea una imposición.
Pero así como se tendrán obligaciones y sanciones, se deberán de contemplar incentivos para quienes cumplan o hagan su esfuerzo por reducir las emisiones contaminantes, es decir “todo el mercado de carbono debe de tener sanciones a quien contamine más y estímulos a quien contamine menos” por lo que se tiene que determinar la gradualidad y el impuesto adecuado.
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En su intervención, Agustín Ávila, titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), dijo que en la administración federal se impulsan proyectos encaminados al cuidado del medio ambiente y una de las metas es que al 2030 al menos el 50% de los vehículos sean cero emisiones, para lo cual se construye la estrategia nacional de movilidad eléctrica a través de que se incentiva el uso de este tipo de vehículos y la construcción de la infraestructura que permita su uso.
