Lo ocurrido en los mercados del mar de la ciudad, tanto los dos que hay en Guadalajara, como el de Zapopan durante la compra de pescados y mariscos para terminar la Cuaresma, obligó a las autoridades a establecer nuevas medidas para este Viernes Santo y no se permite ya el ingreso a más de un comprador.
Es decir, si hay personas que llegan acompañadas a realizar las compras, aunque solo una puede pasar para evitar aglomeraciones y contagios de Covid-19.
Además “se restringirá el ingreso de 50 en 50”, ya que lo registrado el Jueves Santo en el Mercado del Mar de Zapopan, es “una situación inconcebible”, dijo el presidente municipal, Pablo Lemus Navarro.
“Estamos haciendo nuestro trabajo, pero necesitamos de la colaboración también de comerciantes y ciudadanos, para evitar este tipo de tumultos. No podemos ponernos en riesgo ni a nosotros, ni a los demás”, dijo el primer edil zapopano.
Explicó que el municipio está entregando cubrebocas a las personas que acuden al Mercado del Mar, donde se colocaron vallas y al ingreso se entrega gel antibacterial.
Medidas similares se aplican en los dos mercados del mar de Guadalajara, tanto el ubicado en la avenida Gobernador Curiel, como el de la calle Esteban Loera, donde al medio día del Jueves Santo se registraron de manera simultánea al menos 3 mil visitantes realizando compras, la mayoría de ellos, sin acatar las medidas de higiene para evitar la propagación del nuevo coronavirus.
“Es muchísima la gente que no hace caso a la recomendación de solamente salir una persona en caso de ser necesario y es lamentable que vemos familias completas, hasta tres o cuatro integrantes yendo a las compras y eso hace que la gente se aglomere”, explicó Felipe de Jesús López Sahagún, director de Protección Civil y Bomberos en Guadalajara.
En el Mercado del Mar de Gobernador Curiel, se instalaron dos túneles sanitizantes y en el de la Calle 34 los comerciantes colocaron seis túneles sanitizantes, por donde los ciudadanos pasan.
Además, desde la madrugada de este Viernes Santo, personal de la policía municipal acudió a supervisar los inmuebles.
Por parte del municipio tapatío, continúa además el perifoneo invitando a los ciudadanos a permanecer en casa y supervisando que los establecimientos “no esenciales” permanezcan cerrados.
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