Gabriel Isaac tiene 11 años y es uno de los cinco pequeños que acude cada semana al mercado para el taller de periodismo.
Con los primeros programas ya transmitidos en redes sociales, platica que este concepto le ha ayudado no solo a acercarse más a la lectura sino a invitar a más amigos y sobre todo adentrarse a un oficio que quisiera desempeñar de adulto: el del periodismo.
"El taller de periodismo es un taller muy padre. Le pregunté a Víctor si me podía unir y me dijo que sí y así le avisé a varios de mis compañeros para que también estuvieran. Ahorita nos están enseñando a usar la cámara, de cómo hablar, también nos están dejando investigar sobre cosas importantes y así venimos todos los fines de semana".
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Aunque el impacto de todas estas acciones podría alcanzar a las 15 mil personas que subsisten en la colonia, lo cierto es que todavía hace falta mucho por realizar y a muchos por llegar: Sin embargo, para Martínez con que se atraiga a una persona es más que suficiente para generar poco a poco esa cadena dentro de la comunidad.
"El Bibliorefri abarca cuatro puntos muy importantes para la sociedad. El primero es el reciclaje de una basura de este tamaño, como lo es un refrigerador; el segundo es que le damos la oportunidad a los artistas gráficos para que se exprese y tengan una ventana para que puedan ver su obra en el Bibliorefri; el tercero es la comunidad que creamos, que ya lo hemos estado viendo aquí y en otros lados; y el cuarto por supuesto que es la promoción a la lectura. Sí ha llamado la atención, la colonia es muy noble y mucha gente se ha acercado porque están a la espera de ver qué más habrá".
