La diputada del Partido Revolucionario Institucional (PRI), Mariana Fernández Ramírez propuso un 50 por ciento de descuento en los transbordos del Tren Ligero, Macrobús y Sitren.
Una buena parte de los usuarios del transporte público toma dos o más camiones para llegar a su trabajo o a su escuela.
Por eso, "para mitigar un poco el gasto que hacen y que se les ha incrementado, le solicitamos al Poder Ejecutivo autorizar un descuento del 50 por ciento del valor de la tarifa de del boleto de transbordo, cuando el pago sea efectuado mediante el sistema de prepago y el primer boleto se hubiera pagado completo. En pocas palabras, que cuando haya un transbordo, el segundo pasaje cueste la mitad", expuso la presidenta de la bancada del PRI en el Congreso del Estado.
Si los concesionarios no quieren subsidiar, que el Gobierno del Estado lo haga.
Destacó que de los 240 mil usuarios del Tren Ligero, 180 mil utilizan un transbordo, por lo que al mes el subsidio ascendería a 27 millones de pesos.
La opción que ofrece la diputada es que "el Gobierno del Estado sea el que subsidie por la parte del Tren Ligero, que el boleto que te cueste la mitad sea el del Tren Ligero o del Macrobús o el de los trolebuses que sí son los que tiene el propio Estado, tú pagas tu camión de línea normal, tu camión de ruta y ya que llegues al Tren Ligero ese sea el que te cueste la mitad sí son dentro de los primeros 50 minutos".
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"Ahora que, por fin, las tarjetas de prepago están funcionando en los camiones es posible hacer realidad esta propuesta. Solo hace voluntad para programar que cuando se aborde una segunda unidad, dentro de los siguientes 50 minutos desde el primer viaje, sea descontada la mitad del importe, ya que es es injusto e inhumano que un trabajador gaste más de la tercera parte de su salario en camiones", señaló la legisladora..
Apela a la responsabilidad social de las autoridades, a ese cambio que prometieron. La crisis económica y la falta de empleo están afectando a las familias.
"Negar esta realidad y empeñarse en seguir exprimiendo los bolsillos de los ciudadanos sería ahondar la crisis que ya estamos viviendo. El Gobierno debe entenderlo y solidarizarse con quienes más ayuda necesitan", refirió.
Hace más de un año, el actual Gobierno del Estado comenzó a autorizar el aumento a las tarifas del transporte público en la entidad.
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"Lo hizo sin tomar en cuenta la realidad que viven las familias de Jalisco. En 2018, con la tarifa de 7 pesos, y de acuerdo con a Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares del INEGI, las familias de Jalisco gastaban en promedio, dos mil 544 pesos mensuales en su movilidad".
Apuntó que la mayor parte de quienes usan el transporte ganan menos de 6 mil pesos al mes. Es decir, ya gastaban más de la tercera parte de su salario en camiones para su familia.
"Vinieron a decirnos que el modelo ya no era sustentable para los transportistas, pero eso era un engaño porque comenzaron por elevar a 9.50 el costo del Tren Ligero y el Macrobús, los medios de transporte que le pertenecen al gobierno. Prometieron, que a los camiones de las rutas concesionadas y subrogadas no les autorizarían el aumento si no era cumpliendo con una serie de requisitos".
"Con la pandemia, aprovechando que la mayor parte de las personas estaban distraídas y preocupadas por otras cosas más importantes comenzaron a elevar el precio de una ruta tras otra. Dicen que el modelo de transporte ya cambió, pero no es cierto. Y no lo digo yo, lo dice la opinión de expertos como Héctor Castañón. El transporte público en nuestro país no está adaptado a las condiciones físicas de los usuarios, las rutas no llegan a destinos que permitan una calidad de vida razonable, lo que sobra después del gasto de transporte no alcanza a las familias para vivir dignamente, el tiempo de traslado aísla a las personas y las condiciones de viaje son peligrosas, inseguras e insalubres".
"El aumento de 2.50 pesos a la tarifa del transporte es una medida que atenta contra la justicia social y agrava las condiciones de violencia social”. Y eso que aquí no se está hablando de los 50 centavos que se roban porque sus alcancías no dan cambio"..
Admitió que "el Gobierno del Estado no va a dar marcha atrás a este aumento. Ya sabemos que la sensibilidad y la justicia social no es lo suyo.
Pero la situación que se viene para los jaliscienses es muy complicada. Aunque nos digan que en agosto fuimos el segundo lugar nacional en recuperación de empleos, la realidad es que de enero a julio 70 mil personas perdieron su trabajo."
La pobreza y el hambre ganarán terreno, subrayó Fernández, al señalar que CONEVAL estima que este año la población con ingresos por debajo de la línea de bienestar crecerá entre 7.2 y 7.9 puntos porcentuales y que las personas más afectadas serán las que viven en las ciudades.
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