Por una educación de verdad incluyente

En el Día Internacional de la Lengua de Señas, el derecho a la educación ha sido y sigue siendo la principal demanda de la comunidad sorda de Jalisco en las 12 ediciones que se han realizado de su marcha por el centro tapatío, tal como sucedió la tarde de este sábado 28 de septiembre.

Alrededor de 200 personas partieron del cruce de Chapultepec y avenida Vallarta para caminar de manera respetuosa y sí, también gritar consignas para ser escuchados y a atendidos ya que el derecho a la educación no se cumple en los niños y jóvenes sordos.

Ana Guadalupe Herrera Amaral, presidenta de la asociación silente de Jalisco, expresó que el 40% de la población sorda es analfabeta en el país, según el censo de 2010 del INEGI, en México son 75 mil personas sordas las usuarias del lengua de señas mexicano; sin embargo, dijo que la estadística se queda corta "hay mucha gente que se queda en las regiones, queremos trabajar con el INEGI y los capacitadores para visibilizar porque muchos papás esconden a sus hijos y por ende no cuentan".

Foto: Aurelio Magaña.

En la marcha pacífica, hubo muchas familias, pues son los padres los más preocupados por la falta de maestros del lenguaje de señas y tienen que lidiar con el sistema de educación que no atiende el derecho constitucional de una educación integral, incluyente, bicultural, bilingüe.

Rodolfo Torres, director estatal de Inclusión a Personas con Discapacidad, presente en la marcha, dijo a El Occidental que se cumplirá la recomendación de la CEDHJ para otorgar esa educación incluyente.

Chécalo:

Local

UDG prende campaña para prevenir el embarazo en estudiantes

"Es importante tener intérpretes profesionales, porque una cosa es empezar a enseñar un idioma y otro tener interpretes capacitados y con certificaciones necesarias para trabajar con alumnos sordos" dijo Torres; espera junto con la UdeG, ser pioneros en el país para tener una carrera técnica en la enseñanza de lengua de señas mexicana, una formacion institucionalizada, pues no existe a nivel nacional ni estatal, ninguna estancia que certifique profesionales en lengua de señas, ahí también hay un reto.