En el primer día de cobro en el servicio de la Línea 3 del Tren Ligero, el panorama fue diferente, ya no se vieron las largas filas y mucho menos se tuvo el temor de una falla como la del fin de semana, aunque la lluvia dejó al descubierto que las columnas de la parte elevada se pueden convertir en verdaderas cascadas o fuentes de escurrimiento de agua.
En un recorrido hecho se pudo comprobar que en el caso de la estación del Mar uno de los torniquetes ya no funcionaba, que muchos de los usuarios no conocían el sistema de pago electrónico, no tenían tarjetas o no sabían cómo hacerle para pagar el "univiaje", como se le conoce a una sola entrada, pero la disposición de los elementos de seguridad fue básica ya que ellos orientaban a los usuarios de cómo hacer el pago, incluso tuvieron toda la disposición de apoyar en el recorrido hecho por EL OCCIDENTAL.
Es así que prácticamente bajó casi a la mitad la cantidad de usuarios, los vagones ya no iban tan llenos como ocurrió el fin de semana, algunos usuarios consideraban que el precio era adecuado ya que se podía transbordar a las otras dos líneas de forma gratuita, era más rápido su desplazamiento y veían tranquilo el servicio.
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Otros como el señor José González, quien por segunda ocasión se subía a esta línea dijo que le pareció "bien es mucho más rápida y se conecta con más líneas en la ciudad" y del costo "es lo justo, es lo que cobra todo el transporte público".
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Desde su punto de vista él no le cambiaría nada a la recién estrenada Línea Tres del Tren y al contrario la recomienda para que se pueda viajar, en donde sin duda seguirán saliendo detalles a corregir como en toda obra nueva.
Mientras tanto los elementos de seguridad son un factor esencial para su operación ya que están al pendiente de que todos ingresen con cubrebocas y están dispuestos a orientar a los usuarios sobre la forma de viajar y pagar el costo del pasaje para quienes no tienen tarjeta electrónica.
Algunos de los vigilantes señalaron que la afluencia de usuarios había estado tranquila todo el día y quizás aumentaba un poco más en las llamadas horas pico que es en donde se va al trabajo o se regresa a casa una vez cumplida la jornada laboral.
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