El presidente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Alfonso Ramírez Cuéllar advirtió que está a punto de darse el "atraco más vergonzoso que pueda observar la justicia electoral en nuestro país".
Se refirió al proyecto de resolución que está a punto de votarse en la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, donde se pretende que la elección del presidente y Secretario General del Partido sea por encuesta telefónica abierta a la ciudadanía y que el Instituto Nacional Electoral (INE) sea el encargado de realizar las bases y la metodología.
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Por lo tanto, dio a conocer que se oponen a ello y llamó a la militancia de todo el país, ya que los magistrados "se pasan por la borda, pisotean nuestros estatutos y violentan la vida interna del partido".
Con ello, abren la puerta para que el PRI, PAN y enemigos de la 4 Transformación intervengan y decidan por los cargos principales de Morena, militancia que no interviene en los procesos internos de sus respectivos partidos.
Ramírez Cuéllar, agregó que al INE se le pide su colaboración, pero desde los partidos políticos y no por orden de un Tribunal.
El estatuto de Morena es claro en su artículo 35 que para ser presidente y Secretario General primero deben ser consejeros nacionales y en el artículo 37 señala que, en ambos cargos, deben recorrer todo el proceso democrático y contar con el aval de la militancia.
En rueda de prensa desde las oficinas centrales de Morena, el dirigente morenista señaló que el propio Tribunal mandó a Morena a realizar encuestas.
Para ello, se creó la Comisión Nacional de Encuestas con tres responsables y se entregaron las bases.
"Hoy, de buenas a primeras, de un plumazo suprime la Comisión Nacional de Encuestas y traslada al INE para elegir o nombrar a dos de los cargos más importantes del partido".
El llamado a la militancia es a no permitir esta atrocidad y pidió mesura en su decisión a los magistrados, legisladores y funcionarios públicos promotores y hagan a un lado sus ambiciones.
Dejó en claro que las asambleas estatales para elegir a sus dirigencias se pospusieron y fue por la instrucción de la Secretaría de Salud, máxima autoridad ante la pandemia por la que atraviesa el país.