Integrantes de la Federación General de Trabajadores del Estado y Municipios (FGTEM) desconocen a Sergio Alberto Padilla Pérez como interlocutor de ellos ante autoridades y tribunales ya que está persona fue denunciada como aviador al poseer cuatro empleos dentro de diversas administraciones, señaló Cuauhtémoc Peña Cortés.
“Los gremios que integramos esta organización no tiene. Ningún acuerdo de colaboración con la organización que representa Sergio Padilla, ni sabemos si la Federación de Sindicatos de Jalisco (FSJ) existe, además nunca se ha considerado como una verdadera organización sindical, sino una pantalla para negocios turbios, tráfico de influencias y venta de protección laboral, en síntesis, es una organización espuria”, aseguró.
Sergio Padilla sí perteneció a la FGTEM hace algunos años, pero ante las irregularidades y los malos manejos que se descubrieron hace más de 15 años, lo expulsaron porque utilizaba la Federación para “chantajear, hacer negocios turbios, para vender los derechos de los trabajadores” tal como sucedió con el recuento del extinto Sistecozome el cual la Federación había ganado la representación y lo mismo sucedió con otros sindicatos.
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Públicamente se desmarcó del escrito que se redactó en contra del Tribunal de Escalafón y Arbitraje en donde piden que se haga una elección limpia y transparente.
A esta persona que calificó como aviador le exigen que no utilicen el nombre de la FGTEM para decir que trabajan de forma conjunta ya que cada uno va por su cuenta y ellos no desean actuar de la misma manera en donde Sergio Alberto siempre obtiene ventaja de los actos que realiza y cuando se interponen juicios le gusta llevarlos al límite y ampliar los tiempos para quedarse con los recursos.
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“No sabemos realmente qué representa porque es un maestro de la simulación, un maestro de la estafa al utilizar información falsa para armar expedientes, fue parte de la Federación pero cuando se percibió que vendió el recuento del Sistecozome y del Tren Eléctrico fue que lo expulsamos y a partir de ahí como que le agarró sabor a vivir de la representación de los trabajadores, es el mismo que tenía tres o cuatro plazas en Zapopan, en el Congreso y hasta daba clases, pero sólo se dedica a estafar, tal es el caso de Zapotlán en donde simularon actos para quedarse con una toma de nota”.
