El bajo presupuesto tanto del Gobierno Federal como del Gobierno de Jalisco y la injerencia del crimen organizado en campo, bosques y en sí en el medio ambiente en el Estado, las políticas publicas han sido nulas en su protección y en tener una económica activa.
En el marco de “Hablemos y Hagamos” que organiza el partido Hagamos, el periodista, Agustín del Castillo, especialista en el tema del medio ambiente, destacó algunos puntos en esta materia.
En la administración estatal actual expresa contradicciones. Refirió el periodista que el manejo de los bosques por sus dueños ejidos, comunidades indígenas y pequeños propietarios se mantiene como una actividad económica marginal, aunado a la presencia del crimen organizado en las regiones forestales de Jalisco, Michoacán y Guerrero.
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“Los ejidos forestales ubicados en el sur de Jalisco, la región suroccidental de Michoacán y la Costa Grande de Guerrero han sufrido desde hace varios años este problema. En muchos de esos ejidos, los jefes de plaza (de los grupos criminales) presionan a los comisariados ejidales para que vendan su arbolado en pie a empresas privadas o a intermediarios con los que tienen acuerdos de compraventa de esos productos. Por estas circunstancias, los ejidos y comunidades forestales de estas regiones han registrado un claro retroceso en la evolución de sus empresas comunitarias”.
Durante la charla con la militancia de Hagamos se refirió al Bosque de la Primavera, un espacio al que se le destina pocos recursos y sin una política pública para prevenir incendios forestales.
A pesar de que Jalisco es la tercera economía del país por aportación al producto interno bruto, mencionó que a diferencia de Estado de México, y de emporio industrial regiomontano, el de la entidad reviste singularidades: por un lado, en generación de riqueza agropecuaria mexicana, los sectores secundario y terciario, como en toda economía moderna, lo que subraya es su mayor diversificación y el tener una economía más dependiente de los servicios ambientales.
El periodista, Agustín del Castillo expuso que el problema de gestión de los bosques de Jalisco pasa más por fortalecer instituciones que por inyectar un gran presupuesto “pero la merma de dinero federal ha sido tan acusada, que el presupuesto estatal solo ha permitido cubrir áreas que se abandonaron en el gasto federal, como son las áreas naturales protegidas y el programa de combate de incendios forestales”, estableciendo apenas las bases para hacer frente a los desafíos.
Con relación al Fondo Ambiental creado por la Secretaría de Medio Ambiente y Desarrollo Territorial, indicó que puede ser una respuesta de financiamiento a largo plazo, otra posibilidad es la creación de mercados de servicios ambientales, pero en Jalisco solamente existe uno, relativamente consolidado, en Cerro Grande, de la Sierra de Manantlán, que es pagado por la ciudad de Colima.
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“No hay así, un panorama a corto plazo que permita algo más que un moderado optimismo, sujeto a la perseverancia de los actores públicos y privados para gestionar proyectos y más recursos a favor de los bosques”, expresó finalmente el periodista, Agustín del Castillo.
