Convencido de que Jalisco debe elegir si le conviene o no seguir en el pacto federal, pero sobre todo de que no puede seguir perdiendo recursos ni costear caprichos ni proyectos federales que no aportan al desarrollo; el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro Ramírez, presentó una iniciativa para revisar a fondo, replantear y fortalecer los términos en los que se establece la coordinación fiscal entre la entidad y la Federación.
“Son casi 200 años de lucha por nuestra soberanía, por nuestra libertad y nuestra dignidad, contra quienes han querido imponer el centralismo como modelo de dominación y con una distorsión de los principios que dieron origen al pacto federal que tanto trabajo ha costado construir”, dijo desde la sede del antiguo recinto legislativo que se ubica dentro de Palacio de Gobierno.
Luego sentenció “ha llegado la hora de sentarnos frente a nosotros mismos, de nuestras leyes, fundamentos y valores, para decidir el futuro no solo de nuestro Estado, sino de los principios que soportan la unidad nacional”.
Recordó que “durante décadas los atropellos cometidos por el gobierno federal contaron con el silencio cómplice de los gobiernos locales que se doblegaron ante la voluntad del presidente en turno, cualquier intento de exigir respeto a la soberanía de los Estados, fue aplastado por el presidente en turno”.
Tras evocar a Prisciliano Sánchez en la búsqueda de fomentar un desarrollo equitativo y reducir la brecha de desigualdad, el modelo de hace 200 años, sentenció que particularmente en lo últimos 41, presenta un fracaso evidente, que decae en inequidad regional que no resuelve los problemas estructurales de la nación por los cuales fue concebido.
Dijo que “hoy se advierte que el fracaso es evidente, con la desigualdad, la pobreza, violencia y la corrupción, siguen siendo problemas no resueltos, que se agravan además con el paso del tiempo”.
La iniciativa
Bajo tales argumentos, Enrique Alfaro Ramírez dio a conocer los detalles de la iniciativa que presentó al Congreso del Estado, para revisar a fondo, replantear y fortalecer los términos en los que se establece la coordinación fiscal entre Jalisco y la Federación, la que además se centra en normar el procedimiento para que Jalisco pueda celebrar, revisar o cancelar convenios fiscales que beneficien al estado cada 6 años y busca que el estado cuente con un Sistema Tributario para que se encargue de que las personas físicas y morales contribuyan proporcional y equitativamente al gasto público.
Se discutirá hasta agotar el procedimiento de consulta ciudadana que esta misma semana se solicitará al Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Jalisco, para que la diseñe y la coordine. “Vamos a consultarle a los jaliscienses si están de acuerdo en que por lo menos cada seis años revisemos el Pacto Fiscal que norma las competencias fiscales de los estados, municipios y la federación. Vamos a preguntarles si están de acuerdo en que el Ejecutivo Estatal y el Congreso del Estado garanticen que en la relación fiscal con la federación defendamos los intereses de nuestro estado. Vamos a consultarles si respaldan la idea de que, en caso de que a nuestro estado no le convengan los términos de la relación fiscal con la federación, Jalisco se retire del pacto fiscal”.
Jalisco aporta mucho más de lo que recibe
Fue reiterativo en que no busca romper con la Federación, sino conseguir un acuerdo justo para la entidad. Jalisco es un estado que le aporta mucho a la Nación, un pilar fundamental de la economía y quiere seguir siéndolo. Insistió en las desigualdades entre lo que aporta Jalisco a la nación y lo que a cambio recibe.
Durante 2021 -puso como ejemplo- el recorte presupuestal fue de 9 mil 200 millones de pesos reales respecto al año pasado y no hubo un sólo peso de apoyo para Jalisco, para enfrentar la emergencia sanitaria.
Se dejó sin recursos a los municipios de Jalisco para atender sus necesidades más apremiantes y se cancelaron programas y proyectos fundamentales para atender temas como el desarrollo metropolitano o el fortalecimiento de las policías locales.
Fue ignorada la petición de la Universidad de Guadalajara de contar con el presupuesto para garantizar la educación de nuestros jóvenes.
El gobernador mencionó un caso más, ya que si Jalisco aporta casi el 8 por ciento al Producto Interno Bruto (PIB) del país, la entidad sólo recibe el 0.96% del presupuesto federal.
Se preguntó además por qué el IMSS invierte en la salud de los jaliscienses 10 mil millones de pesos menos al año de lo que recibe de los patrones de Jalisco, y por qué el gasto federal por alumno de Jalisco es sólo la mitad de lo que invierte la federación en por alumno en estados como Campeche.
Planteó asimismo la desventaja de la aportación de los jaliscienses que dan la mitad del financiamiento a la Universidad de Guadalajara, mientras que la CDMX no le aporta un peso a la UNAM, y el hecho de que Jalisco aporte más del 40% del presupuesto a su sistema de salud, mientras la federación subsidia casi el 100% de los sistemas de salud en otros estados y criticó que cada jalisciense reciba sólo 12 mil 400 pesos del gasto federalizado cuando un habitante de la ciudad de México recibe 19 mil 100 pesos anuales.
