El regidor independiente de Guadalajara, Roberto Delgadillo González, señaló que la venta de terrenos en la zona de Gobernador Curiel y 18 de Marzo a la empresa Caabsa fue un robo para las finanzas municipales, al malbaratar los predios con el pretexto de que ya estaban contaminados, lo cual sería un impedimento para que se construya vivienda tal como se indicó en el dictamen de venta.
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“Quiero comentar un tema que me parece un auténtico robo al patrimonio de Guadalajara. Y lo digo con estas palabras porque al que roba hay que llamarlo ladrón, al que miente, mentiroso, y a los que abusan de la confianza que los tapatíos les habían otorgado, y vendieron parte de su patrimonio, hay que llamarlos ladrones, mentirosos y traicioneros”, ya que el metro cuadrado se vendió en 400 pesos, indicó.
Con esas acciones que afectarán a los habitantes de las colonias Higuerillas, Álamo Industrial y La Nogalera, al instalarse una planta de transferencia de Caabsa, no sólo en su salud sino que las autoridades les dieron el beneficio de financiarles la construcción de esa planta. Pero también se viola la ley ya que es considerada una zona de alta fragilidad. Ante esta situación analiza presentar una denuncia.
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Dijo que la venta de los 81 mil metros cuadrados se hizo con el argumento que era nulo su valor para el municipio, “realizando una operación de venta sin tomar en cuenta los valores catástrateles actuales y alegando ser un terreno devaluado por su alto índice de contaminación”, pero el problema radica en que la empresa sólo pagó en efectivo 35 millones de los más de 159 que costaría el perdió total.
Así, el regidor detalló que en esta transacción el Ayuntamiento recibirá en efectivo 32 millones de pesos y el resto del pago en especie correspondiente al 75% del valor total que consta de 50 millones para la construcción de su planta de transferencia. Una inversión de 38 millones en el Parque El Dean; 10 millones para el jardín botánico, 15 millones para vialidades, 15 millones para el parque, entre otros gastos, todo en beneficio de la empresa Caabsa Constructora que fue la que ganó la licitación para construir vivienda “popular” en esa zona.
