Por su legado y haber sido un auténtico reivindicador del urbanismo y el paisajismo, este sábado en la Feria Internacional del Libro (FIL) de Guadalajara se rindió homenaje al arquitecto, escultor y escritor Fernando González Gortázar.
Considerado como uno de los grandes arquitectos y escultores de México y Latinoamérica, el también autonombrado jalisciense (pese a que nació en Ciudad de México) falleció el pasado 7 de octubre a los 79 años. En este sentido algunos arquitectos lo recordaron como un loco genial con un extraordinario sentido del humor, así como una persona entrañable, cariñosa y muy erudita.
Te recomendamos:
"El que conociera a Fernando y no crea que estaba loco entonces no lo conocía. Fernando era un loco genial, pero la parte genial es la indispensable. Híjole, yo creo que con unos 20 locos más geniales como Fernando de verdad este país y este mundo serían seguramente diferentes", refirió el arquitecto Álvaro Morales.
Al hablar de su amor profundo a las plantas y a la naturaleza en general, y de cómo fue pupilo de Luis Barragán en sus andares por la Perla Tapatía en donde estudió, remembraron el legado que dejó en Guadalajara y en otras partes del país o del mundo, como: La Puerta, la entrada del Parque Gonzáles Gallo, la torre de los cubos o la plaza Fuente en la Perla Tapatía; así como el Paseo de los Duendes en Nuevo León, el Museo Chiapas de Ciencia y Tecnología o la Fuente de las Escaleras en Madrid.
"No había sitio por el que anduviéramos en la ciudad de Guadalajara, donde no hiciera una propuesta de colocar o erigir ya sea un elemento como un motivo de interés para entrar a la ciudad", añadió el arquitecto Alejandro Canales.
Felipe Leal, quien recibió el premio ArpaFIL 2022 por su trayectoria arquitectónica, habló de Fernando Gonzáles Gortázar como un personaje de enormes habilidades que cultivó la creación, a quien por cierto no le gustaba que lo relacionaran más como escultor que como arquitecto.
"Tenía un don de la palabra inigualable para quien se dejase acariciar. Tenía una calidad humana y qué decir de su conocer y gozo profundo por la música popular mexicana, de su fascinante elocuencia y gentil presencia. Cuando el arte y el saber logran enaltecer y generar orgullo por pertenecer a una cultura, cumplen cabalmente su misión. Querido y admirado Fernando, cumpliste", refirió.
Ya sea como el gran ser humano, el entrañable amigo o el magnífico maestro, llamaron a no dejar de realizar este tipo de eventos que perduren su memoria y sobre todo a preservar y restaurar su patrimonio inmaterial pues es la mejor forma de honrarlo.
.jpeg "Claudia Delgadillo (3).jpeg")
