La desaparición de tres jóvenes en el poblado Santa Ana, Tepetitlán, en Zapopan, es la número 20 masiva en Jalisco, en lo que va de este Gobierno. Esta vez sucedió a 15 kilómetros del centro de la capital del Estado. Son tres hombres de 19, 28 y 38 años de edad, a los que los ocupantes de dos camionetas, escoltadas por varias motocicletas, se los llevaron, según expresaron familiares a El Occidental.
De acuerdo a datos del Sistema de Información sobre Víctimas de Desaparición, al corte del 31 de agosto en Jalisco se contabilizaron 14, mil 181 personas desaparecidas, de las cuales 12 mil 449 son hombres y mil 732 mujeres.
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Los datos oficiales señalan que de diciembre del 2018 al 31 de agosto pasado se contabilizaron 14 mil 432 personas localizadas, de las cuales 12 mil 178 fueron con vida y 2 mil 454 sin vida.
En caso previo a este suceso, ocurrido en Lagos de Moreno y donde las víctimas fueron cinco muchachos, aún se desconoce su paradero. Sus padres sostienen que se hace muy poco o casi nada, mientras que el Coordinador de Seguridad, Ricardo Sánchez Bwruben asegura que se han agotado todas las instancias.
Prácticamente el mismo reclamo han hecho los familiares de estos tres jóvenes desaparecidos en Santa Ana Tepetitlán, en el municipio de Zapopan, identificados como Jesús Fernando Márquez Díaz de 19 años de edad, quien como seña particular tiene una cicatriz en la barbilla; Sergio Díaz Corona de 38 años de edad, que tiene un tatuaje con el número 13 en la mano derecha y un pavo real en el brazo derecho, y Julio César Rodríguez Gutiérrez de 28 años, quien cuenta con un tatuaje con la imagen de una calavera en el hombro izquierdo, la imagen de Cristo en el brazo derecho, una figura femenina azteca en la mano izquierda, la leyenda "Nort" en el pecho y una cicatriz en la barbilla.
Su familia reporta que desaparecieron desde el fin de semana. Ellos denunciaron el lunes 25 de septiembre y de plano la noche del pasado martes 26 de septiembre, acompañados de un grupo de aproximadamente 70 personas, se manifestaron en el cruce de la Avenida López Mateos y Camino a Santa Ana Tepetitlan, para exigir su búsqueda inmediata.
Al grito de ¡vivo se los llevaron y vivos los queremos!, los manifestantes bloquearon de forma intermitente la Avenida López Mateos en el sentido de periférico hacia San Agustín justo debajo del puente peatonal que se ubica en el mencionado cruce. Esto obligó a los automovilistas a desviar su ruta sobre el camino a Santa Ana Tepetitlán.
Las fichas de los tres se publicaron hasta el miércoles 27 de septiembre por parte de la Comisión Estatal de Búsqueda.
Erika Marcela Diaz Corona, mamá de José Franciscico y hermana de Segio, reconoce que ya tienen más información y todo ocurrió cuando los tres estaban reunidos en el cruce de la Privada Ejidal con la calle Camino Nacional, justo afuera de una tienda de abarrotes, y arribaron varios sujetos desconocidos que se los llevaron por la fuerza en por lo menos dos camionetas, una negra y una gris, que iban escoltadas por cuatro motocicletas.
“Nos avisaron los vecinos que habían visto que habían levantado a uno, nos dijeron que fuéramos a ver. Cuando llegamos ya no había nada, ya se habían ido y en el transcurso pues vimos que no llegó su tío ni el otro vecino y pues estamos en lo mismo, pensando que de pronto también a ellos se los llevaron”, agregó en entrevista con El Occidental.
Al día siguiente de la manifestación, explica la entrevistada, fueron recibidos, en Palacio de Gobierno en donde personal de la Fiscalía le informó que están investigando el caso, pero hasta el momento no hay pistas de los tres hombres. “Nos dijeron que nos iban a ayudar, pero hasta ahorita no vemos cómo nos están ayudando porque no han encontrado a mi hijo. Dijeron que iban a revisar las cámaras, pero no se ha visto nada, no se ha visto movimiento de nada”, explicó Erika Marcela Diaz Corona. A una cuadra del lugar de los hechos hay una cámara del Escudo Urbano C5, cuyas imágenes ya son analizadas por personal de la Fiscalía.
Lagos de Moreno, entre el olvido y aislados operativos
Para quienes también pasa el tiempo y no hay respuestas, es para los padres de los cinco jóvenes desaparecidos hace ya más y medio en Lagos de Moreno, localidad localizada a 187 kilómetros de la capital del Estado.
José Dolores Lara, papá de Diego Lara Santoyo, narra a detalle cómo es que en todo este tiempo fueron localizados en tres diferentes hechos los cuerpos de siete personas calcinadas, pero ninguno de ellos corresponde a los jóvenes desaparecidos.
La poca información que les llega es lo que se ha publicado en medios de comunicación y redes sociales. “La verdad que no hay nada, no han dicho nada. Todo está igual. Nomás lo que sale en los medios, lo que va saliendo en las redes. Ahorita no, no, ningún confirmado”, expresó.
José Dolores describió a su hijo Diego un joven trabajador, que desde muy temprano comenzaba sus labores en el taller de herrería familiar, en cuanto terminaba acudía a entrenar artes marciales.
El pasado lunes 11 de septiembre, se llevó a cabo una misa en la parroquia de la Asunción, en memoria de los cinco jóvenes desaparecidos el pasado 11 de agosto, en el Mirador de San Miguel, en dicha localidad, y durante la ceremonia oficiada a por Monseñor Jorge Alberto Cabazos Arizpe, Administrador Apostólico de la Diócesis de San Juan de los Lagos, éste expresó: "La peor de las muertes, la muerte se padece por las situaciones naturales o de violencia como ha sucedido con nuestros hermanos. Hoy Jesús nos recuerda con un abrazo en nuestro corazón, su termina, su amor, su estar con nosotros. Dichosos los hombres de espíritu. Yo les digo a todos ustedes, familiares de estos hermanos, y en realidad a todos nosotros, a todo México que queremos que haya paz, que haya un orden. Dichosos los que lloran".
El pasado 11 de agosto, desaparecieron Roberto Olmeda, Diego Lara, Galván, Jaime Adolfo Martínez y Dante Hernández. Aunque siguen las investigaciones, hasta hoy no se sabe nada de ellos.
Como se recordará, días después de su desaparición se difundió una foto y video en el que se aprecia que uno de los jóvenes agrede a otro de sus amigos, en un acto de presunto reclutamiento forzado.
Al respecto el coordinador Estratégico de Seguridad del Estado, Ricardo Sánchez Beruben, expresó: "El trabajo se realiza en la búsqueda, en identificación y también en la localización de los responsables".
"El trabajo que hay en Lagos de Moreno, específicamente en la desaparición de estos cinco muchachos, corre en dos vertientes. Uno, la localización de los cuerpos, los cuales con un trabajo de gabinete se logra identificar la zona de El Mirador, una casa de seguridad; posteriormente un predio que tiene características con las de este video que se viraliza en redes sociales, luego con una ladrillera", agregó el funcionario estatal.
Sánchez Beruben expresó que no se ha podido extraer tejido que ayude a lograr la confronta genética de los restos hallados en la ladrillera con los familiares de los cinco jóvenes. "En cuanto a la prueba y confronta genética, la realidad es que los restos localizados en la ladrillera estaban bastante deteriorados, lo que ha dificultado bastante la extracción de un tejido vivo que se pueda realizar la confronta".
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Recordó que hasta el momento hay tres detenidos por el hallazgo de restos humanos en la ladrillera ubicada en la colonia La Orilla del Agua.
"Van tres detenidos, uno que era el operador de la ladrillera y que fue localizado en Teuchitlán, lo que nos dice que también estaba tratando de evadirse del municipio de Lagos de Moreno. Dos hermanos que también tienen un rol un poco más participativo, un poco más elevado dentro de alguna organización criminal, quienes son localizados en Querétaro, también muestra que estaban buscando evadirse".
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