Vecinos del Fraccionamiento El Roble Residencial, en Tonalá, se encuentran desesperados ante la oleada de robos que han vivido en los últimos meses pues aseguran los delincuentes hacen de las suyas a la hora que quieren.

Uno de los casos más recientes es el del esposo de la señora María del Rosario, al cual asaltaron cuatro sujetos, justo afuera del fraccionamiento, sobre la carretera a Zapotlanejo.

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“Ya van a ser 15 días. Viniendo él de su trabajo lo asaltaron junto al fraccionamiento. Le quitaron sus cosas y le dieron un cachazo. Estaban armados cuatro personas en moto".

Los delincuentes han cometido cualquier tipo de robos, a casas, vehículos,motos y a personas sin importar la hora del día.

“Aquí ya se han metido departamentos han robado carros y motos ni se diga. Aquí ya van varias motos que se llevan. Entonces tenemos muchos problemas de inseguridad. La policía casi no viene. Y cuando reportamos los robos vienen demasiado tarde", comentó Teresa.

La falta de vigilancia por parte de la Policía Municipal, los propios vecinos han hecho brigadas para hacer rondines en diferentes turnos, así lo explicó Mary González.

“Ellos salen de 6 a 8 personas, hasta una mujer ha salido a realizar rondines y se programan en cuestión de las 12 de la noche a las 3, de las 3 a las 4, se turnan. Hay otras personas que de nuestras casas estamos observando".

Ante la desesperación han solicitado al ayuntamiento de Tonalá, el permiso para cerrar el fraccionamiento y evitar que ingresen los delincuentes.

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“Ya hemos hecho muchas solicitudes, también varios vecinos nos han apoyado con arquitectos y demás que es lo más viable, pero por parte del gobierno municipal nos dan puros saltos, no nos dejan hacer nada de esa parte”, señaló Abraham.