Quedaron atrás los años en los que el Congreso de Jalisco era de los más caros del país y hoy aparece en el número 19 y nos cuesta 130 pesos por ciudadano. El 30% de su presupuesto, además, lo dedica a la auditoría.
Un estudio hecho por el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) registra un ligero aumento en comparación con los años 2019 y 2020, pero mantiene cierto equilibrio en cuanto a gasto.
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Su nómina -así se ha advertido durante estos dos años- tuvo un ligero incremento, pero nada comparable con la racha entre el 2012 y 2018, cuando su presupuesto era cercano a los 800 millones de pesos anuales.
Hoy reporta un gasto de 773 millones de pesos más los 315 millones de pesos dedicados a la auditoría.
En suma, el poder legislativo de Jalisco -incluyendo la auditoría- es de mil 88 millones de pesos, lo que lo coloca en tercer lugar sólo después de ciudad de México que tiene un presupuesto total de 2 mil 144 millones de pesos y el Estado de México, en primer lugar, con mil 262 millones de pesos.
Sin embargo, el escenario cambia cuando se calcula el presupuesto per cápita del Congreso Estatal con el número de habitantes.
Aparece en el lugar 19 con un costo de 130 pesos por habitante, superando solo a Durango con 123 pesos por habitante, Coahuila con 119 pesos, Guanajuato con 105 pesos, Hidalgo con 103, Chiapas con 90 personas por habitante y el Estado de México 74 pesos por habitante.