Habitantes de los fraccionamientos Paseos de Santiago, mejor conocido como Urbi, Loma Real y de los alrededores al vertedero de Matatlán, se manifestaron en Casa Jalisco, en donde pidieron el cierre definitivo del tiradero, debido a que son afectados por los ríos de lixiviados y ya comienzan presentar problemas de salud.
Son entre 40 mil y 45 mil personas las que habitan en esa zona, mismas que son afectadas, sin embargo fueron alrededor de 20 manifestantes.
Los quejosos señalan que había Sido cerrado y por eso se fueron a vivir ahí, sin embargo en principio que se reabrió operaba como planta de transferencia, donde llegaban los camiones de basura a vaciar, mientras que los pepenadores extraían el material reciclable y los residuos eran compactados y llevados al vertedero de Laureles.
"Es un vertedero que ya tenía casi dos décadas que no se utilizaba, más que como planta de transferencias y que ahora en menos de un año han rebasado todo espacio. Han depositado en este año más basura, que en dos décadas, pero sin ningún control y dónde está la autoridad", resaltó Armando Bañuelos, uno de los líderes vecinales.
Por si no lo viste:
Aseguró que lo que piden a las autoridades es el cierre inmediato del vertedero de Matatlán y una investigación de las actividades que ahí realiza la empresa Caabsa Eagle.
Los manifestantes decidieron ir a Casa Jalisco porque ven que ni al presidente municipal de Tonalá, Sergio Chávez tampoco es atendido por la empresa. Además les preocupa que los menores reciben clases entre la pestilencia de los residuos.
"El olor ha sido muy fuerte al grado de tener que cerrar las ventanas y eso no evita que el olor penetre en nuestras casas. Llevé a mi hijo al doctor, pregunté a un especialista en la salud y me dijo que puede perjudicar en las vías respiratorias, digestivas y hasta en los riñones", señaló Sandra, quien es vecina de la zona.
Por su parte, la señora Carmen, pidió el cierre definitivo, ya que opera de forma irregular.
"Solicitamos al Gobierno municipal que clausure de manera inmediata, la supuesta planta de transferencia, porque de acuerdo a la normativa, todos los vecinos tienen que estar de acuerdo y ni siquiera existe un estudio de impacto ambiental, por lo que está operando de manera irregular".
Finalmente los quejosos fueron recibidos por representantes del Gobierno del Estado, quienes organizaron una reunión para este lunes en las instalaciones de la Procuraduría Estatal de Protección al Ambiente (Prepa) para que sean escuchados.
A la protesta también se sumaron estudiantes y académicos de la Universidad de Guadalajara.
