A pesar de que es una disposición de carácter obligatorio, cada vez más son los tapatíos que hacen caso omiso al uso del cubrebocas al salir a la calle, como medida preventiva por la emergencia sanitaria por Covid-19.
En lugares cerrados es donde se aprecia esto especialmente, como el Mercado Libertad, mejor conocido como San Juan de Dios, pues no solo un gran número de clientes sino hasta de locatarios incumplen con este punto, y dejan de lado la recomendación de aplicar la sana distancia.
En los ingresos al lugar hay filtros sanitarios con personas que toman la temperatura, invitan a usar el cubrebocas y reparten gel antibacterial, sin embargo, al interior es otra realidad pues con pasillos angostos, ni mismos locatarios -particularmente en los niveles superiores- se toman a pecho las medidas.
Al centro del mercado es una situación similar, pues conforme avanza el día se puede observar a paseantes que se sientan a la sombra de los árboles a reposar, como si no hubiera pandemia.
En corredores comerciales como el de Pedro Moreno, de la Calzada Independencia hasta Maestranza, también se relajaron las medidas de seguridad, pues si a inicios de semana se pudo observar a personas midiendo la temperatura y repartiendo gel antibacterial, este sábado los principales ingresos lucieron solitarios, salvo con algunos señalamientos.
De cara a la nueva normalidad a la que la ciudad entra poco a poco, la reactivación económica que se ha dado de manera paulatina obliga a que comerciantes y ciudadanos por igual cumplan con los protocolos de sanidad, a fin de evitar la propagación del virus ahora que en Jalisco son cada vez más los contagios por coronavirus. Por ello, la insistencia de las autoridades municipales y estatales a acatar todas las recomendaciones, a fin de que la reactivación se lleve de la mano al cuidado de la salud.
