Durante la temporada de estiaje, en donde los ríos, lagunas o el acuífero alcanzan el nivel de caudal mínimo en la época de mayor calor, debido principalmente a la sequía, las zonas forestales se ven amenazadas, los cuales emiten contaminantes nocivos para la salud humana y los ecosistemas, desprenden a la atmósfera grandes cantidades de partículas en suspensión y gases tóxicos, con inclusión de monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno y compuestos orgánicos distintos del metano.
La sequía influye negativamente en la aplicación de las medidas prevención y extinción de los incendios forestales y esta difiere según la magnitud, duración, intensidad, ecosistemas y actividades del ser humano.
Te puede interesar ➡️ En 2050 habrá 30% más incendios forestales
¿Qué es lo que provoca la sequía?
Principalmente es la falta de lluvias, pero existen otros tipos de factores que contribuyen como las de origen natural o antropogénico (calentamiento global del planeta).
Existen distintos tipos de sequía:
- Sequía meteorológica: Cuando hay escasez continua de lluvias.
- Sequía hidrológica: Cuando los cursos de agua o los volúmenes embalsados se encuentran por debajo de lo normal durante un plazo temporal dado.
- Sequía agrícola o hidroedáfica: Cuando hay déficit de almacenamiento en acuíferos.
Durante este tiempo, el agua no es suficiente para abastecer las necesidades de las plantas, los animales y los humanos que viven en dicho lugar.
El fuego depende de dos cosas: el tener suficiente combustible y el desecar ese combustible para que prenda fuego. De esta forma, a corto plazo, más sequías probablemente signifiquen mayores incendios a medida que la vegetación se sequeBen Cook, del Instituto Goddard de Estudios Espaciales, investiga las "mega sequías"
⬇️ Dale play ⬇️