/ domingo 24 de marzo de 2019

Se requiere una acción pastoral permanente de la Iglesia a favor de la paz: Román Ramírez 

"Necesitamos un planteamiento que se apoye en la construcción de una nueva sociedad, el planteamiento de una vida con sentido que nos abra a los demás y no nos encierre en nosotros mismos", indicó.

Cada asesinato y cada desaparecido es "una derrota humana que no podemos obviar y no podemos seguir indiferentes", manifestó Román Ramírez Carrillo, del Arzobispado de Guadalajara.

"Ha surgido la alarma en Guadalajara, por un gran repunte en el número de asesinatos dolosos, donde la mayoría son jóvenes."

En los campanarios de las iglesias y templos de Jalisco, cada vez más, la "triste y pausada melodía del toque de duelo acompaña a los que han muerto por la violencia. Las campanas nos dicen que otros muchos más se han ido y claman al cielo que se abra para recibirlos", expresó Ramírez.

Relacionado:

Los 540 muertos en lo que va del trimestre enero-marzo, "exigen una reflexión madura y seria para el conjunto de la sociedad. Cada asesinato y cada cuerpo encontrado en esta gran fosa a cielo abierto que es Jalisco, es un drama en sí mismo. Primero, por la pérdida de una vida, y más si es de jóvenes y niños. Se entremezclan la tristeza, el sentimiento de indefensión, la rabia, la angustia, la patología social que estamos viviendo y la desesperación. En las familias, los amigos y el entorno cercano se impregnan del sabor de la impunidad, que cada vez más muestra su rostro".

Puntualizó a El Semanario, órgano informativo del Arzobispado de Guadalajara, que hace falta apoyar una visión profunda de la vida y de la paz que se quiere.

"Necesitamos un planteamiento que se apoye en la construcción de una nueva sociedad, el planteamiento de una vida con sentido que nos abra a los demás y no nos encierre en nosotros mismos", indicó.

Esta realidad en la que se encuentra el país, de la corrupción y la violencia en la que hace años se vive, "nos llama como Iglesia a redoblar esfuerzos y actuar unidos, integrando y engarzando todas nuestras fuerzas y recursos. Necesitamos una primavera de paz. Necesitamos una acción pastoral permanente de la Iglesia de Guadalajara a favor de la paz. Las acciones de la Iglesia no se pueden quedar solamente en comunicados, estos son sólo el principio del proceso, pues se hace imprescindible
incidir socialmente".

El diálogo y colaboración con las autoridades en los diferentes niveles de Gobierno, con la sociedad civil, con los organismos estatales y municipales, son urgentes para construir un pensamiento de paz.

Cada asesinato y cada desaparecido es "una derrota humana que no podemos obviar y no podemos seguir indiferentes", manifestó Román Ramírez Carrillo, del Arzobispado de Guadalajara.

"Ha surgido la alarma en Guadalajara, por un gran repunte en el número de asesinatos dolosos, donde la mayoría son jóvenes."

En los campanarios de las iglesias y templos de Jalisco, cada vez más, la "triste y pausada melodía del toque de duelo acompaña a los que han muerto por la violencia. Las campanas nos dicen que otros muchos más se han ido y claman al cielo que se abra para recibirlos", expresó Ramírez.

Relacionado:

Los 540 muertos en lo que va del trimestre enero-marzo, "exigen una reflexión madura y seria para el conjunto de la sociedad. Cada asesinato y cada cuerpo encontrado en esta gran fosa a cielo abierto que es Jalisco, es un drama en sí mismo. Primero, por la pérdida de una vida, y más si es de jóvenes y niños. Se entremezclan la tristeza, el sentimiento de indefensión, la rabia, la angustia, la patología social que estamos viviendo y la desesperación. En las familias, los amigos y el entorno cercano se impregnan del sabor de la impunidad, que cada vez más muestra su rostro".

Puntualizó a El Semanario, órgano informativo del Arzobispado de Guadalajara, que hace falta apoyar una visión profunda de la vida y de la paz que se quiere.

"Necesitamos un planteamiento que se apoye en la construcción de una nueva sociedad, el planteamiento de una vida con sentido que nos abra a los demás y no nos encierre en nosotros mismos", indicó.

Esta realidad en la que se encuentra el país, de la corrupción y la violencia en la que hace años se vive, "nos llama como Iglesia a redoblar esfuerzos y actuar unidos, integrando y engarzando todas nuestras fuerzas y recursos. Necesitamos una primavera de paz. Necesitamos una acción pastoral permanente de la Iglesia de Guadalajara a favor de la paz. Las acciones de la Iglesia no se pueden quedar solamente en comunicados, estos son sólo el principio del proceso, pues se hace imprescindible
incidir socialmente".

El diálogo y colaboración con las autoridades en los diferentes niveles de Gobierno, con la sociedad civil, con los organismos estatales y municipales, son urgentes para construir un pensamiento de paz.

Policiaca

Pocos avances en la búsqueda de Aldo González Sevilla, señala papá del joven desaparecido

Este viernes la familia del estudiante tuvo una reunión con personal de la Fiscalía Especializada en Personas Desaparecidas

Local

Jalisco enfrenta el serotipo 3 de dengue

Personas ya presentaron los signos y síntomas de dengue en Jalisco

Local

¿Te interesa trabajar en el sector automotriz? Conoce aquí más detalles

La feria del empleo ofertará más de un centenar de vacantes