La Universidad de Guadalajara no está de acuerdo en un aumento generalizado al transporte público sin una evidente mejora en la calidad del servicio; pero, si el aumento será generalizado hasta diciembre, entonces la totalidad de rutas deberán cumplir lo que adeudan por 30 años, si no, que se les retire la concesión, expresó el rector general, Ricardo Villanueva Lomelí.
“Los jaliscienses hace tiempo aceptamos una tarifa que quien cumpla ciertos requisitos se le autorice; pero, quien no los cumple, no va”, mencionó en entrevista.
Opinó el exsecretario de Planeación, Administración y Finanzas del Gobierno del estado, que falta una comunicación correcta de parte del actual Gobierno, porque debe ser claro en retirar las concesiones a quienes no han cumplido con lo mínimo para mejorar el servicio y poder cobrar 9.50 pesos.
Y es que apoya la postura de la FEU de que hay muchas rutas que ya cobran la nueva tarifa y no cubren los requisitos, en tanto reconoció Siteur sí merece el ajuste tarifario.
Además, hay muchas inconsistencias en el sistema de prepago, porque lo que hay son alcancías que cobran 10 pesos porque no dan cambio, “los redondeos no se valen”.
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Respecto a estatizar el transporte público, dijo estar de acuerdo, ya que es una obligación del estado ofrecer un servicio digno, seguro y de calidad, si el concesionario no lo hace, si no cubre todo el territorio y llega a todos los rincones aunque no sea negocio, no debe mantenerse la concesión.
En cuanto a un subsidio a la tarifa, Villanueva Lomelí dijo no ser factible, sobre todo no ahora que no se tiene claridad en los ingresos para los transportistas.
“Hasta no ver los números reales de la operación del transporte, no subsidiar con recursos fiscales, si los particulares no transparentan de sus cuentas privadas”, puntualizó.