En medio del bullicio que trajo la urbanización está Atemajac del Valle en Zapopan, recientemente se renovó su plaza y conserva parte de la arquitectura original.
De acuerdo con documentos municipales, la plazoleta comenzó a construirse a principios de los años 30´s y su quiosco traslada a cualquiera varias décadas atrás.
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Y es que sentarse en una de las bancas transmite tranquilidad y como sucede en los pequeños poblados, ahí todavía muchas personas, sobre todo de la tercera edad disfrutan de pasar un rato contemplando las aves volar o a la gente pasar.
Información del gobierno de Zapopan refiere que la plazoleta de Atemajac del Valle es una de las más antiguas del municipio y aunque se recuperaron algunos espacios para conservar la tradición del lugar, también realizaron otras adecuaciones para atraer más visitantes.
Ahora el pequeño pueblito dentro de la ciudad, muy cercano al centro de Zapopan cuenta con fuentes bailarinas, jardineras y más orden en el corredor comercial.
Como parte del proyecto que pretende darle más empuje turístico a Atemajac del Valle colocaron letras gigantes de lámina con el nombre de la delegación y renovaron el monumento a Miguel Hidalgo y Costilla.
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“Regresamos a los trazos del modelo original que datan del año de 1931. Esta plaza pública quedó muy parecida al modelo original; son zonas grandes y con jardines. Además, cuenta con cuatro callejones que llevan a las avenidas principales de la zona, se regresa al quiosco tradicional. Colocamos una fuente y un ágora en donde puedan tener espacio de socialización”, explicó Ismael Jáuregui Castañeda, director de Obras Públicas e Infraestructura de Zapopan.
En los trabajos de remodelación del pueblito, el municipio invirtió 20 millones de pesos.