Más allá de los problemas que se puedan generar con la lluvia y la inundación de la zona, la seguridad personal de quienes caminan por el paso a desnivel de la Avenida Washington y la calle Roble en la colonia de El Fresno, se ve comprometida por el simple hecho de que no se ve nada en el pasillo.
Este paso vehicular que se construyó por debajo de las vías del tren tiene una altura aproximada a los cinco metros y es de los de mayor circulación del área metropolitana al ser una vialidad principal de esta colonia y que conecta con la Avenida Lázaro Cárdenas o en la continuación de Cruz del Sur.
Podría interesarte → Desazolve en canales y presas será permanente en Tlaquepaque durante las lluvias
Llama la atención porque con lluvias abundantes, al igual que la mayoría de los pasos a desnivel llega a representar un riesgo para los automovilistas, pero poco se ha visto el riesgo a la integridad de las personas el pasar por un punto que prácticamente queda aislado de la vista de los ciudadanos.
El pasillo por donde se pasa caminado este desnivel vehicular comienza protegido con una serie de barandales metálicos y con cierta distancia que permite ver quién va caminando, qué lleva, género, estatura, situación física y sobre todo si va acompañado de alguien más.
Al momento se inicia el camino debajo de las vías, se pudo observar en un recorrido que la persona que camina desparece de la vista de todos ya que en ese tramo de alrededor de 50 metros de largo es protegido por una barda que se construyó, quizás como una forma de contención del agua, pero si en este tramo no hay luz, Eda zona se convierte en una verdadera trampa para el peatón y en blanco fácil de la delincuencia, esos escasos tres minutos a cinco que se puede llevar uno en recorrerlo son una odisea, nadie ve qué sucede, nadie escucha, nadie es testigo ya que los conductores por el ruido que generan los vehículos no escucharían nada.