Porque generará múltiples daños ambientales en detrimento del estado y sobre todo de quienes ahí viven, pobladores de Tala se manifestaron este domingo para expresar su postura en contra del relleno sanitario que se construye en el municipio.
Con una caravana de alrededor de 500 automóviles que circularon hasta la cabecera municipal de Tala, ciudadanos, que se dijeron independientes o sin el estandarte de alguna organización, alzaron la voz a fin de que autoridades municipales y estatales echen para atrás mencionado relleno metropolitano, a cargo de la empresa Caabsa Eagle, con el que se quiere sustituir el vertedero de Los Laureles.
“No sabemos ni comprendemos cómo Tala se puede convertir en un basurero metropolitano si ni siquiera es un municipio metropolitano, si ni siquiera recibe presupuesto metropolitano, si ni siquiera está integrado dentro de la red metropolitana. Creemos que cada municipio debe hacerse responsable de su basura. Tala no va a ser basurero de Guadalajara”, platicó en entrevista don José, uno de los manifestantes.
Hace días trascendió, en un medio de comunicación, los trabajos de construcción que ya se hacen para el relleno sanitario y una planta de separación de residuos, y aunque en su momento el alcalde de Tala, Enrique Buenrostro, dijo desconocer las obras y que se clausurarían por falta de permisos, después la administración se retractó mediante un comunicado, al especificar que el proyecto sí tiene permiso municipal.
Chécalo:
En este sentido, y a manera de resistencia, vecinos y ejidatarios del municipio y otras comunidades cercanas como Los Ruiseñores y El Refugio, decidieron manifestar su inconformidad y a su vez informar a la población de la zona, en aras de lograr más apoyo y así conseguir que el relleno, llamado por autoridades como Centro Integral de Economía Circular, no se concretice.
“Fue una manifestación pacífica, tranquila, con reclamo a las autoridades por la falta de información de este centro que no es más que un basurero metropolitano. Manifestamos nuestra preocupación porque de un día para otro se supo todo, y la intención fue que la gente conociera del proyecto y que la autoridad supiera que no estamos de acuerdo con eso. Como no se nos preguntó antes, ahora les estamos diciendo que no estamos de acuerdo, que lo rechazamos y que exigimos su cancelación”, agregaron.
Aunque la respuesta para la movilización fue positiva, sí admitieron que no saben si emplearán más manifestaciones, pues de acuerdo a lo que autoridades den a conocer en los siguientes días, sabrán qué ruta tomar. En este sentido no descartaron que algunos vecinos puedan irse por la vía legal para frenar el nuevo vertedero.