Sin la presencia de estudiantes, sin invitados especiales y sin discursos oficiales se llevó a cabo la ceremonia de izamiento de bandera en Plaza Liberación con lo que se da inicio a las actividades del Grito de Independencia, pero sí con la presencia de elementos de las Fuerzas Armadas y gente que paseaba por el centro de Guadalajara.
El gobernador Enrique Alfaro Ramírez, mencionó que se comenzó con la celebración de una fecha importante para México, pero “en un escenario difícil, no como nos gustaría, extrañamos a las escuelas presentes, en el Grito vamos a extrañar a la gente en la Plaza de Armas, pero es un momento en el que tenemos que ser prudentes, pensar en la salud antes que en otra cosa”, sin arriesgar a los ciudadanos.
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Los jaliscienses y turistas que caminaban por la Plaza de Armas, con emoción se sumaron a la ceremonia ya que “siempre es un acto bonito, porque la presencia de las Fuerzas Armada le da un realce importante, normalmente vienen niños de escuelas que hoy no pudieron estar presentes, pero la verdad es que el centro luce esplendoroso, la gente que está paseando yo creo que disfrutó este sencillo, pero muy sentido homenaje a nuestro Lázaro patrio”.
Mientras tanto en lo alto de asta, la monumental Bandera de México pretendía desplegarse ante el tenue viento que la mecía de un lado a otro, ante las miradas de decenas de personas que no se cansaban de admirar su diseño y de cómo poco a poco subía hasta lo más alto de la estructura y con el marco de fondo de la catedral metropolitana, por un lado, por el otro la estatua de Miguel Hidalgo y Costilla rompiendo una cadena.
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