Durante las campañas se ha visto que también candidatas atacan a través de su publicidad con mensajes racistas y clasistas a otras abanderadas.
Cándida Elizabeth Vivero Marín, doctora del Centro de Estudios de Género del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades (CUCSH) de la Universidad de Guadalajara (UdeG), señaló en entrevista con El Occidental que también las mujeres pueden ser violentadoras de otras mujeres.
Se ha visto la falta de sororidad de algunas candidatas a diferentes puestos de elección, durante las actuales campañas con miras al 6 de junio próximo.
”Sí definitivamente, la educación machista nos atraviesa a todas y todos, es una cuestión cultural que está introyectada, está aprendida, retransmitida y se naturaliza todo este tipo de violencia, el matiz, y la línea de racismo, el clasismo está ahí presente y la cuestión de la edad son violencias y formas de discriminación que desafortunadamente hemos aprendido y están arraigadas en el consciente de la mujer y del hombre”.
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Vivero refirió que es una labor de reeducar a las mujeres para que se sensibilicen y tengan conciencia de género. Lo importante es visibilizar y atacar las violencias.
En muchas ocasiones uno les pregunta a las mujeres que hacen comentarios racistas y clasistas, y ellas lo niegan, ya que reproducen una educación que recibieron en el hogar y lo vieron reflejado en la sociedad la “currícula oculta” como se le llama, a toda esta educación que recibimos.
Todas estas mujeres, agregó la investigadora y académica, ni siquiera lo van a tener presente, por lo que generar conciencia de género es una tarea que “debemos fomentar entre nosotras para que sepan y reconozcan que ellas también pueden ser violentadoras de otras mujeres.
Las violencias tienen muchas caras. Falta mucha educación hacia las mujeres también para hacer esta conciencia de género que tanta falta hace”.
Sobre la violencia política que se ha visto, dijo que hace dos años no se tenía la sensibilidad, ni la lectura para detectarlos y hoy ya se puede ver y puede deberse a ese bagage y experiencia o los actores involucrados son más cínicos.
”Ahora sí que cada vez están con menos cortapisas para llevar a cabo sus acciones. Son ese tipo de asuntos que competen a la lucha feminista, pero de una manera particular porque es llevar los derechos a su cumplimiento cabal, a que se reconozca la paridad de género, que hay violencia política, que existe violencia al interior de los partidos políticos”, señaló.
Se vió en la cuestión de paridad en la Zona Metropolitana de Guadalajara donde la mayoría son hombres quienes encabezan las candidaturas a los principales municipales en la ZMG, lo que habla de que falta mucha sensibilidad, capacitación y educación para que las mujeres accedan a estos terrenos.
“Cuando lo hacen vemos como son violentadas y ninguneadas y dejadas de lado por su contraparte masculina”, precisó la especialista.
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