Unos mil 200 elementos operativos fueron dados de baja de la Fiscalía de Justicia, Seguridad Pública del Estado y policía vial, fueron despedidos. Las autoridades aducen que no pasaron los exámenes de control y confianza, pero otro buen número dio a conocer que ya no se les renovaron los contratos y hubo deficiencias en las administraciones que impidió que se les siguiera pagando.
“Tiene relación directa y específica con los exámenes practicados a nivel estatal por el Centro Estatal de Control y Confianza, estamos hablando de personal que tuvo problemas en algunos de los reactivos que se les practicaron en estos exámenes, en consecuencia la Contraloría Interna está procediendo con la finalidad de que se lleven a cabo los procedimientos correspondientes”, dijo el Fiscal de Justicia de Jalisco, Gerardo Octavio Solís Gómez, que fue insistente en que se debe de cumplir con lo dictaminado.
Reconoció que es apenas el principio y vendrán más procedimientos: “Serían alrededor de 60 policías de investigación los que traen esa problemática y otros 60 aproximadamente de diferentes nombramientos. Esto es una etapa inicial, es un proceso, en el que vamos a estar trabajando a través de la contraloría interna para actualizar todos y cada uno de los procedimientos pendientes. Será un proceso constante y con esto inicia, y en la medida que vayan avanzando, iremos informando”.
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La Manifestación
Pero mientras se llevaba a cabo esta rueda de prensa, en el centro de Guadalajara se llevaba a cabo la manifestación de policías despedidos de otras dependencias, que a decir de uno de sus representantes Jonathan Carvajal, oficial pensionado, suman más de mil 200 elementos despedidos.
“Tienen alrededor de una semana que les notificaron a unos mil 200 elementos que estaban despedidos, entre personal de la fiscalía, policía vial y policía del Estado. Les dijeron que es por la culminación de contrato, no tienen ninguna causa, ninguna falta, tienen buena conducta, entre 15 y 20 años de servicio, y les están despidiendo injustamente”, expresó el gendarme.
Los uniformados alegaron que hubo una mala administración y a muchos de ellos ya no pudieron pagarles.
Empezaron en el parque Rojo y terminaron en palacio de gobierno, donde exigieron una respuesta sobre lo que está sucediendo.
Trascendió que en el caso de la policía vial la mayoría son policías varones con más de una década de servicio y que serán sustituidos por mujeres, del grupo conocido como “las Toritas”, según argumentaron.