Jalisco, como otros 20 Estados de la República, se caracterizaron por ser “gastalones”; incluso por arriba del gobierno federal.
Servicios personales, generales; materiales y suministros, son los rubros donde se le fue la mano. Solo en el primero, gastó un 89 por ciento más de lo planeado.
Así lo revela el estudio que realizó el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco) en el ejercicio fiscal del 2019. El documento pone en evidencia que la austeridad en la mayoría de los Gobiernos Estatales es más un elemento discursivo que una realidad.
No obstante que en los últimos cinco años (2015-2019) ha sido una constante comprometerse a hacer uso eficiente de los recursos públicos, éstos no se refleja en una reducción de gastos.
Por si no lo leíste:
Tan es así que los poderes ejecutivos estatales -detalla el Imco- gastaron un total acumulado de 3.13 billones de pesos en gasto administrativo en ese mismo lapso y 2019 no fue la excepción.
Los poderes ejecutivos que gastaron más en términos absolutos -en este rubro- durante 2019 fueron los de la Ciudad de México (117 mil 314 mdp), el Estado de México (71 mil 657 mdp) y Veracruz (54 mil 497 mdp). Estas tres entidades gastaron en conjunto el 35% del gasto administrativo total.
El Informe Estatal del Ejercicio del Gasto (IEEG) 2020 analiza las principales partidas y variaciones del gasto público de los 32 poderes ejecutivos estatales. Permite monitorear y comparar el gasto de todas las entidades federativas.
Cuando se refiere al gasto administrativo o burocrático, estamos hablando de todas aquellas asignaciones de recursos destinadas a la compra de bienes y servicios necesarios para ejecutar las funciones de gobierno de manera satisfactoria.
Se incluye: El pago de sueldos y salarios, honorarios y prestaciones del personal al servicio del Poder Ejecutivo del estado; la compra de insumos y suministros como artículos de oficina, materiales de limpieza, alimentos y utensilios, medicinas, suministros médicos, uniformes, gasolina y diésel; además, el pago de servicios básicos (agua, luz, gas, internet, telefonía fija y celular, etc.), servicios profesionales, viáticos, publicidad oficial, ceremonias oficiales, entre otros.
Las variaciones observadas en el gasto burocrático dejan también a la vista -dentro del análisis- las verdaderas "prioridades" de las administraciones estatales. Y dentro de esa falta de claridad, se puede advertir que optaron por gastar en viáticos, publicidad oficial, ceremonias, entre otras, y se olvidaron de programas de combate a la pobreza, becas, entre otros) y/o que contribuyen a incrementar el patrimonio público (ej. inversión en infraestructura).
JALISCO Y SUS GASTOS
Ya se citaba a Ciudad de México, Estado de México y Veracruz como los que más gastaron en 2019, entre los que menos gastaron son:Colima (2 mil 741 mdp), Baja California Sur (2 mil 441 mdp) y Aguascalientes (2 mil 257 mdp) ejercieron de forma conjunta apenas 1.1% en este concepto.
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Jalisco aparece a media tabla, pero destaca en lo que se refiere a gastos personales donde en 2019, 21 entidades redujeron ligeramente su gasto en sueldos y salarios (servicios personales) de funcionarios públicos en relación con los montos originalmente autorizados. Otros 11 no, se excedieron y, entre ellos, está el gobierno jalisciense que gastó 89 por ciento más de lo aprobado.
Y es que si bien en la mayoría de los planes y programas de los gobiernos estatales se incluye la reducción de salarios a funcionarios de alto rango, así como límites a la contratación de personal; al final dichas medidas no se tradujeron necesariamente en un ajuste a la baja del gasto en este concepto.
En el caso específico de Jalisco, el gobierno del Estado gastó casi el doble (93.6%) de lo aprobado (tenía aprobados 8 mil 640.4 millones de pesos y terminó ejerciendo 16 mil 727.5 millones de pesos).
Prácticamente más de la mitad de los ejecutivos estatales gastaron más de lo aprobado para gasto burocrático: 20 entidades gastaron más de lo que dijeron que iban a gastar y 13 de ellas tuvieron variaciones superiores a 10 por ciento en 2019.
El gobierno de Jalisco, por ejemplo, dio continuidad a sus gastos por encima de lo planeado y así se advierte de los porcentajes que alcanzó de 107.2%, 99.1%, 91.3%, 83.6% y 76.3%, a los montos aprobados por concepto de gasto de operación en 2015, 2016, 2017, 2018 y 2019, respectivamente.
Su gasto total en 2019 fue de 117 mil 620 millones de pesos y de éstos los servicios personales representaron en total 35 mil 769 millones de pesos, de los que 16 mil 727 millones de pesos fueron para remuneraciones al personal de carácter permanente; 7 mil 305 millones de pesos a remuneraciones adicionales y especiales; 5 mil 529 millones de pesos a otras prestaciones y 4 mil 368 millones de pesos a lo que corresponde a seguridad social.
Los servicios generales corresponden al 4 por ciento de su gasto, algo así como 4 mil 948 millones de pesos, divididos de la siguiente manera: Mil 767 millones de pesos en otros servicios generales, 657 millones de pesos en servicios de arrendamiento, 642 millones de pesos en servicios básicos y 590 millones de pesos en servicios de instalación, reparación, mantenimiento y conservación de
Finalmente, el tercer rubro, por mil 506 millones de pesos -un 1 por ciento del gasto-, se dividió de la siguiente manera: 471 millones de pesos en combustibles, lubricantes y aditivos; 446 millones de pesos en alimentos y utensilios, 406 millones de pesos en materiales de administración, emisión de documentos y artículos oficiales, el resto se fue en herramientas, refacciones y accesorios menores.
INEFICACES LOS CONGRESOS LOCALES PARA LIMITAR EXCESOS
Sobre eso Imco hace la siguiente observación: “Cuando variaciones en el mismo sentido y en magnitudes similares ocurren durante tres años consecutivos, podemos concluir que reflejan deficiencias estructurales en el ejercicio de los recursos públicos estatales. Las estimaciones de gasto consistentemente poco realistas son reflejo de un inadecuado proceso de planeación y ejecución por parte de las secretarías de finanzas estatales, así como de la nula intervención de los congresos locales para limitar variaciones excesivas que contravienen el sentido original del gasto establecido en los presupuestos de egresos estatales”.
Un ejemplo es el gasto en comunicación social, donde en 2019, las distintas administraciones estatales destinaron 7 mil 299 millones de pesos y publicidad oficial (monto que equivale a 1.2 veces el presupuesto para la Secretaría de Economía de México en 2020 (6 mil 256 mdp).
Ya en el total de los rubros, los Estados que gastaron menos de lo aprobado son: Nuevo León (-22.6%), Veracruz (-21.6%), Guanajuato (-18.1%), Querétaro (-15.9%), San Luis Potosí (-15.5%), Chiapas (-13.4%), Coahuila (-13.0%), Estado de México (-12.9%) y Quintana Roo (-12.5%).
Conoce más...
ESTATUS DE JALISCO
En Gasto Administrativo / Cuarto lugar / 42 mil 222.9 millones de pesos
Diferencia Aprobado-gastado / Segundo lugar / 76.3%
Servicios Personales / Primer lugar / 89%
Materiales y Suministros / 17 lugar/ 22.10%
*El Imco es un centro de investigación apartidista y sin fines de lucro dedicado a enriquecer con evidencia la toma de decisiones públicas para avanzar hacia un México justo e incluyente.
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